Restyling y nuevos motores
El próximo mes de octubre se pondrá a la venta la nueva gama Mondeo de Ford, la cual presenta un notable restyling, mejoras de equipamiento y cuatro nuevos motores. Además, no sólo no sube de precio, sino que las versiones equivalentes cuestan 850 € menos. De este modo Ford pretende ganar cuota de mercado y acercarse a los líderes del segmento que engloba a las berlinas generalistas, hoy día dominado por el Volkswagen Passat y al que le sigue el Opel Insignia.
Autocity asistió a la presentación internacional del modelo, donde pudimos conducir las dos nuevas motorizaciones más potentes tanto en diésel como en gasolina: el 2.2 TDCi de 200 cv obligatoriamente asociado al cambio manual (por ahora) y el 2.0 Ecoboost de 240 cv, únicamente disponible con el eficaz cambio automático Powershift. Pero antes de comentar las sensaciones de conducción que producen estos dos poderosos modelos vamos a ver qué cambia en el nuevo Mondeo y cómo se estructura la gama.
Siguiendo las tendencias que hace unos meses presentaron los renovados Galaxy y S-Max, y al igual que hará en breve el próximo C-Max, el Mondeo muestra ahora una nueva cara que se caracteriza por los leds de la iluminación diurna, el rediseño de la parrilla, el nuevo capó, etc. También el interior se modifica con cambios en la consola y en el cuadro de relojes, que no solo presenta un nuevo diseño sino también nuevos dispositivos.
En cuanto al equipamiento –con tres niveles (Trend, Titanium y Titanium S) y varios paquetes adicionales- este nuevo Mondeo se enriquece con gran cantidad de elementos de vanguardia hasta tal punto que pocos de sus rivales pueden reunir semejante despliegue tecnológico. Entre otras cosas el nuevo Mondeo puede llevar el sistema de cambio de carril (Lane Departure Warning), la alerta para el conductor (Driver Alert), las luces largas automáticas (Auto High Beam), el sistema para control de puntos ciegos (Blind Spot Information System), el limitador de velocidad (Speed Limiter), el cierre de puertas traseras eléctrico (Rear Door Power Child Locks) y la cámara trasera (Rear View Camera).
Además de los niveles de acabados, por carrocerías la gama Mondeo ofrece tres opciones, aunque en el mercado español las versiones de 5 puertas acaparan el 86% de las ventas, dejando un discreto 10% para los familiares Sportbreak y un casi anecdótico 4% para los sedán de 4 puertas. Debido a estos porcentajes de ventas, por ejemplo el nuevo Ecoboost de 240 cv no es posible combinarlo con los modelos de 4 puertas. Recordemos que, en cualquiera de sus carrocerías, el Mondeo es uno de los modelos más grandes de la categoría, con una longitud de 4,78 metros (5p) y 4,85 metros (4p y Sportbreak); además de unos enormes maleteros de 540/550 litros, que en el caso del familiar se puede ampliar abatiendo los asientos hasta los 1.740 litros.
Vayamos a las motorizaciones. Se mantienen intactas las opciones diésel intermedias 2.0 TDCi 140 cv y su evolución de 163 cv, así como la de acceso a gama 1.8 TDCi de 125 cv (aunque está última se retirará próximamente); mientras que en gasolina sigue ofreciéndose el propulsor de gasolina atmosférico 2.0 de 145 cv, con cambio manual, y el turboalimentado 2.0 Ecoboost de 203 cv, con cambio automático Powershift.
Pero lo que hoy nos interesa son las novedades, cuatro nada más y nada menos. Del novísimo 1,6 litros turbo gasolina de 160 cv todavía no disponemos de datos de consumos y prestaciones, aunque sabemos que por ahora se ofrecerá obligatoriamente asociado al cambio manual de seis velocidades. También asociado al cambio manual se encuentra el 2.0 TDCi de 115 cv (desde 24.600 €), un motor que a la larga sustituirá al veterano 1.8 TDCi. La nueva mecánica de acceso a gama sólo gasta 5,3 l/100 km de media y emite 139 g/km de CO2; mientras que sus prestaciones declaran una aceleración de 0 a 100 km/h en 11,2 segundos y una velocidad máxima de 192 km/h.
Ahora bien, lo mejor de la nueva gama lo encontramos en los poderosos 2.2 TDCi 200 cv y 2.0 Ecoboost de 240 cv; versiones que analizamos al detalle en la siguiente página.
Precios nuevas versiones Mondeo (desde octubre):
Gasolina:
–1.6 EcoBoost 160cv Titanium (4p ó 5p): 27.800 €
–1.6 EcoBoost 160cv Titanium (Sportbreak): 28.550 €
–2.0 EcoBoost 240cv Titanium S Powershift (5p): 36.850 €
–2.0 EcoBoost 240cv Titanium S Powershift (Sportbreak): 37.600 €
–1.6 EcoBoost 160cv Titanium (4p ó 5p): 27.800 €
–1.6 EcoBoost 160cv Titanium (Sportbreak): 28.550 €
–2.0 EcoBoost 240cv Titanium S Powershift (5p): 36.850 €
–2.0 EcoBoost 240cv Titanium S Powershift (Sportbreak): 37.600 €
Diesel:
–2.0 TDCi 115cv Trend (4p ó 5p): 24.600 €
–2.0 TDCi 115cv Trend (Sportbreak): 25.350 €
–2.2 TDCi 200 cv Titanium (4p ó 5p): 31.000 €
–2.2 TDCi 200 cv Titanium (Sportbreak): 31.750 €
–2.2 TDCi 200 cv Titanium S (5p): 34.000 €
–2.2 TDCi 200 cv Titanium S (Sportbreack): 34.750 €
–2.0 TDCi 115cv Trend (4p ó 5p): 24.600 €
–2.0 TDCi 115cv Trend (Sportbreak): 25.350 €
–2.2 TDCi 200 cv Titanium (4p ó 5p): 31.000 €
–2.2 TDCi 200 cv Titanium (Sportbreak): 31.750 €
–2.2 TDCi 200 cv Titanium S (5p): 34.000 €
–2.2 TDCi 200 cv Titanium S (Sportbreack): 34.750 €
El nuevo Ford Mondeo, sobretodo en las versiones tope de gama, se diferencia sustancialmente de su predecesor en un primer golpe de vista. Conserva la elegancia del modelo actual, pero la mejora con un estilo más deportivo y unos detalles más modernos. En el puesto de conducción se tiene una gran sensación de espacio y de estar rodeado de materiales de calidad. Si además nos ponemos al volante del acabado Titanium S “aderezado” con alguno de los paquetes tecnológicos, lo que parece es que estamos casi ante un Mercedes Clase E o algún coche de un nivel superior. Estas versiones de alta potencia se ven reforzadas exteriormente también por las salidas independientes de escape. Por lo que se refiere a los modelos probados por Autocity, en las fotos se puede distinguir el 2.2 TDCi 200 cv de color azul claro con carrocería familiar del 2.0 Ecoboost 240 cv de color marrón metalizado con carrocería de cinco puertas. Al volante del diésel de 200 cv con cambio manual (más adelante se ofrecerá en opción el automático) se percibe una fuerza enorme gracias a sus 420 Nm desde 1.750 rpm (450 Nm en momentos puntuales). Tanto es así, que requiere un breve periodo de compenetración para dosificar el acelerador y manejar el cambio, ya que al principio es fácil provocar fuertes aceleraciones prácticamente sin pretenderlo. Su registro de aceleración de 0 a 100 km/h es de 8,1 segundos (0,8 segundos menos que con el 2.0 TDCi de 163 cv), aunque el consumo también se incrementa 0,7 l/100 km hasta llegar a una media de 6,0 l/100 km. A igualdad de equipamiento la diferencia de precio con el de 163 cv es de 2.000 euros, por lo que al reflexionar sobre si merece la pena o no pagar este sobreprecio por esta mayor fuerza y prestaciones todo es cuestión de prioridades personales. Evidentemente para la mayoría de los conductores con el 2.0 TDCi de 163 cv (o incluso con el 2.0 TDCi de 140 cv) es más que suficiente; pero para quien valore por encima de todo las prestaciones Ford ha lanzado esta poderosa versión diésel de cuatro cilindros.
En cuanto al tope de gama en gasolina, el nuevo motor de 240 cv supera al ya conocido de 203 cv (propulsor que se sigue comercializando por 3.000 euros menos). Aunque parte de la misma base esta nueva realización ha mejorado notablemente la potencia y, por consiguiente, las prestaciones, solo que en este caso lo ha logrado sin perjudicar el consumo medio (tanto en el de 203 cv como en el nuevo de 240 cv es de 7,7 l/100 km). Y por lo que se refiere a prestaciones, nada menos que 246 km/h (14 km/h más) y 7,5 segundos en el 0 a 100 km/h (0,4 segundos menos). En la práctica el manejo de este coche es toda una delicia, tanto por su suavidad, como por su empuje o como por la dulzura y efectividad de su cambio Powershift.
Debido a sus dimensiones y peso (1.569 kilos el 5p y 1.588 kilos el Sportbreak) este coche no brinda precisamente un comportamiento muy deportivo, pues lo que se siente al volante del Mondeo Ecoboost 240 cv es otra cosa. Parece más bien una gran berlina de lujo muy confortable y señorial; eso sí, muy rápida. La caja Powershift permite dos modos “normal” y “sport”, más un tercero manual, aunque este último únicamente mediante la palanca y no con levas en el volante (como es habitual en la competencia). En cualquiera de los modos de uso su funcionamiento es estupendo, pues resulta rápido, intuitivo y, sobre todo, muy suave. De hecho, si no se está muy atento y vigilando la aguja de cuentavueltas no te das ni cuenta de que cambia de velocidad.
Estamos ante los topes de gama de los nuevos Mondeo. Tanto el diésel como el gasolina ofrecen con sus mecánicas de cuatro cilindros unas prestaciones y un refinamiento de marcha similar al de algunos motores V6. Además no consumen ni contaminan mucho, por lo que es evidente que resultan dos opciones muy interesantes para los amantes de las prestaciones.