Cómo actuar cuando un camión sufre una avería en carretera

Son las tres de la madrugada en la AP-7. El camión avanza cargado con 20 toneladas de mercancía cuando, de repente, un ruido metálico rompe el silencio de la cabina.

El vehículo se detiene en medio de la autopista, con el riesgo de que otro conductor no lo vea a tiempo.

¿Sabes qué hacer en ese momento? Cada año, miles de transportistas se enfrentan a esta situación, y muchos no están preparados.

Muchos de los accidentes en carretera protagonizados por vehículos pesados tienen su origen en fallos mecánicos que podrían haberse evitado.

Sin embargo, las causas técnicas no son solo el origen de los mismos. También hay que contemplar los factores humanos.

No en vano, la diferencia entre un susto y una tragedia puede estar en cómo actúes en los primeros minutos.

La carretera no perdona, y menos cuando hablamos de vehículos de gran tonelaje. Tanto desde el punto de vista de la salud como desde el plano económico.

Una avería mal gestionada puede costar miles de euros en reparaciones, multas o pérdidas de carga, sin contar el riesgo para la seguridad del conductor y del resto de usuarios.

Con este contexto en mente, ¿sabrías cómo actuar cuando un camión sufre una avería en la carretera?

¿Por qué tendrías que arriesgarte? Para minimizar riesgos, te explicamos qué debes hacer si tu camión sufre una avería, cómo prevenirla con mantenimiento y tecnología, y por qué contar con un servicio profesional que, como el ofrecido por Servireac, te permitirá llegar a tiempo o quedarte tirado en la cuneta.

Primeros pasos ante un problema con un vehículo pesado en la carretera

1. Mantener la calma y actuar con seguridad

El primer minuto cuando un camión sufre una avería es crítico. Por ello, lo primero que debemos hacer es mantener la calma y actuar con seguridad.

Tan pronto como se detecte el fallo, hay que parar el camión y, posteriormente, colocar las luces de emergencia para advertir a otros usuarios de la incidencia.

Recuerda que es obligatorio usar el chaleco reflectante y señalizar correctamente el vehículo con los triángulos de seguridad, ubicando éstos a una distancia suficiente para alertar con tiempo a quienes se acerquen.

En la medida de lo posible, trata de desplazar el camión hacia el arcén o zonas seguras, evitando bloquear carriles o puntos peligrosos del trazado.

2. Evalúa la situación sin riesgos

Cuando todo esté seguro, no intentes reparar el camión si no tienes experiencia. Podrías empeorar el problema o poner en peligro tu seguridad.

Sin embargo, si el conductor tiene conocimientos técnicos básicos puede hacer un diagnóstico preliminar para identificar problemas sencillos, como un fusible quemado o identificar una rueda pinchada.

3. Llama a un servicio de asistencia profesional

Acto seguido, contacta con una empresa especializada en vehículos pesados.

Lo más recomendable es esperar la llegada del servicio de asistencia, comunicando con detalle la ubicación y cualquier síntoma observado.

La empresa Servireac, por ejemplo, cuenta con una red de profesionales y tecnología avanzada, lo que garantiza respuestas rápidas para que el vehículo vuelva a circular en el menor tiempo posible o sea trasladado al taller más cercano.

4. Espera en un lugar seguro

Con todo lo demás en funcionamiento, espera la llegada de la asistencia en un lugar seguro.  

Si estás en un arcén, quédate dentro del camión con el cinturón abrochado. Si la zona es peligrosa (curva, poca visibilidad), aléjate del tráfico y refúgiate en un lugar protegido.

En el caso de estar una autovía o en una autopista y puedes hacerlo, salte del andén y aléjate lo máximo posible para evitar cualquier riesgo innecesario.

Tal y como explican desde Servireac, “en una avería, lo primero es la seguridad.

Lo segundo, llamar a quien pueda solucionarlo rápido y, lo tercero, alejarnos del camión para garantizar la protección de los conductores”.

Prevención: el poder del mantenimiento y la tecnología

Es cierto que hay averías que no se pueden prevenir, como un pinchazo o un reventón.

Sin embargo, una amplia mayoría sí que se pueden prevenir si los camiones son revisados y se someten a un buen mantenimiento preventivo.

Este trabajo es, sin duda, el mejor seguro ante siniestros y problemas en la carretera.

Por ello, es importante que tanto los conductores como las empresas logísticas apuesten por este trabajo de mantenimiento y revisar cada 20.000 kilómetros o seis meses como mucho los neumáticos, frenos y suspensión, niveles de aceite, refrigerante y baterías.

Sobre este punto, desde Servireac, destacan que “un mantenimiento adecuado puede llegar a evitar el 70% de las averías”.

Con las revisiones de camión adecuadas y los consejos que hemos visto en este artículo, una avería en carretera no tiene por qué ser un desastre. Recuerda: señalización adecuada, mantenimiento preventivo y un servicio de asistencia profesional como Servireac son las mejores prácticas para minimizar riesgos.

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