La CE cierra expediente contra España al reducir la ayuda para Ford Almusafes
El cierre de la investigación se ha producido después de que las autoridades españolas hayan reducido las subvenciones de 24,2 millones a 11,2 millones de euros, nivel que no requiere la aprobación de Bruselas.
En 2012, España notificó a la CE su plan de conceder a Ford una ayuda para el reequipamiento de la planta de Ford Almusafes, con el objetivo de poder fabricar el nuevo modelo Transit Conect.
La investigación preliminar de la CE puso de manifiesto la posibilidad de que las subvenciones no respetaran las normas europeas sobre ayudas estatales.
El proyecto en la planta de Almusafes, cuyo presupuesto asciende a unos 418 millones de euros, ha sido ejecutado igualmente, pero la ayuda estatal se ha limitado a 11,2 millones, inferior a la inicialmente anunciada.
La decisión sobre el caso Ford Almusafes se ha dado a conocer el mismo día que la CE ha autorizado la concesión por parte de Alemania de una ayuda de 43,67 millones de euros a Porsche para ampliar la planta existente en Leipzig, en Sajonia, con vistas a fabricar el nuevo modelo «Porsche Macan».
La evaluación de la Comisión ha puesto de manifiesto que la ayuda era necesaria para que el proyecto siguiera adelante en Leipzig, y que los efectos sobre la competencia eran reducidos.
La CE ha aprobado asimismo una ayuda del Estado alemán para la fábrica de BMW también en Leipzig, pero ha reducido de 45 a 17 millones de euros la suma autorizada, al estimar que sólo una parte de ese montante era necesario para llevar a cabo el proyecto.
En el caso de Hungría, la CE ha abierto una investigación en profundidad sobre la ayuda de 133,3 millones de euros que las autoridades húngaras han concedido a Audi para un proyecto de ampliación de su planta en Györ.
El Ejecutivo comunitario considera que, teniendo en cuenta la fuerte posición de esa empresa en el mercado y la difícil situación de este mercado, la ayuda podría perjudicar a la competencia.
El vicepresidente de la CE y responsable de Competencia, Joaquín Almunia, dejó claro que el objetivo de Bruselas ‘es garantizar que el dinero de los contribuyentes se destine sólo a incentivar inversiones que, de otro modo, no se llevarían a cabo, y que generen un verdadero valor añadido para la región’.
‘Comprobamos que la cuantía de la ayuda otorgada no exceda de lo necesario para atraer proyectos de inversión a una región desfavorecida’, precisó.