Por tierras de Goya

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Dedicar una mañana a recorrer parajes desconocidos a bordo de vehículos todoterreno, conociendo pueblos y espacios naturales, es una de las experiencias más gratificantes que existen, sobre todo para los amantes de la naturaleza y del 4×4. En esta ocasión, el atractivo radicaba en visitar el lugar de nacimiento de Francisco de Goya y Lucientes, uno de los pintores más admirados del mundo. En Fuendetodos se encuentra hoy día un museo de grabados y su casa natal, así como monumentos dedicados al genial pintor. Otro punto de interés en nuestra ruta, se localizaba en Belchite y sus alrededores, escenario de un sangriento episodio de la Guerra Civil. Si bien el recuerdo es amargo, a nadie dejará indiferente observar como por los montes cercanos todavía permanecen las trincheras y los polvorines que se construyeron aquellos años, y mucho menos las ruinas del pueblo viejo, muestra de la dureza de la batalla.

En el paisaje de la comarca, Campos de Belchite, predomina la estepa. Tan sólo algunas zonas de monte conservan las características del bosque mediterraneo, en el que abundan la encina y el pino carrasco, variedades que crecen con fuerza y se apoderan de los caminos, rompiendo de alguna manera con la aridez propia de la zona. La comarca Campos de Belchite es una de las zonas más despobladas y deprimidas de Aragón, en las que la economía de sus habitantes se sustenta principalmente en la agricultura y prácticamente no existen los regadíos.

Para la ocasión dispusimos de tres vehículos: los dos extremos de la nueva gama Land Rover -Freelander Td4 y Defender Td5- mas un veterano Range Rover TD. Decimos los dos extremos por las diferencias que hay en su concepción, duro y tremendamente eficaz en campo el Defender y cómodo y refinado el Freelander, aunque como veremos más adelante pueden resultar buenos compañeros de viaje.

Agradecemos a Florencio Pérez, gerente de Cuéllar Concesionario (Rover, Land Rover y MG para Zaragoza) el entusiasmo y la dedicación que mostró para la realización de la travesía.

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La ruta comienza en Zaragoza, desde donde tomamos la carretera nacional 330 en dirección Valencia que enseguida dejaremos para desviarmos hacia la urbanización Fuente de la Junquera. Una vez allí comienzan los caminos, entre áridas zonas de cultivo hasta las primeras ascensiones que nos llevan a los llamados Planos de María de Huerva. Desde lo alto, al amanecer y a varios kilómetros de la ciudad, se divisa una espectacular perspectiva de Zaragoza, difícil de imaginar si no se ha llegado hasta el citado punto. Las abundantes e inusuales lluvias caídas en la zona días atrás, dejaron un firme muy resbaladizo y con profundos charcos, terreno divertido para la práctica del TT pero en el que hay que andar con cuidado. La primera localidad visitada fue Valmadrid, un lugar en el que todavía se vive como en el típico pueblo agrícola, algo sorprendente debido su cercanía a Zaragoza.

Tras ingerir el primer alimento en el bar de Valmadrid nos dirigimos hacia la Sierra Gorda, el punto más alto de la zona. Por todos estos montes es fácil encontrar refugios escavados en las colinas que resguardaban a los combatientes de la Guerra Civil de posibles bombardeos. Dejando atrás la antigua zona bélica, hicimos un alto en la abandonada Cantera de la Princesa, donde todavía quedan edificaciones al pie de la desparecida línea del ferrocarril de vía estrecha que unía Zaragoza con Utrillas. Esta línea de 125 kilómetros, puesta en funcionamiento en 1904, servía para transportar el material extraído de las minas de la provincia de Teruel hasta Zaragoza. Transitando por ella en algún tramo llegamos a La Puebla de Albortón, donde debido al interés de la zona y a las características del terreno decidimos alargar la ruta más de lo previsto inicialmente.

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Y el momento de poner a prueba las cualidades de los vehículos llegó en el espectacular barranco de Zafrané. Los impresionantes cortados forman un pasillo por el que, debido a lo resbaladizo y abrupto del firme, resultaba complicado circular por él. En este terreno el coche preferido era sin lugar a dudas el Land Rover Defender. Sus cualidades ‘off road’ le permiten el paso por difíciles obstáculos sin esfuerzos, conviertiéndose en el remolcador de los otros TT cuando éstos quedaban atrapados. El Freelander es más capaz de lo que parece y llevado por manos expertas puede afrontar zonas sorprendentes aunque si se mete la rueda donde no se debe… El veterano Range Rover TD de nuestra aventura, que tan buenas maneras ha demostrado siempre, se vio penalizado por unos neumáticos poco adecuados y también tuvo que ser socorrido por el todopoderoso Defender.

Después de ‘chapotear’ en el barro durante un buen rato, y dejando de lado (paso restringido) dos interesantes espacios naturales protegidos -reserva ornitológica de El Platerón y reserva de la fauna silvestre de La Lomaza-, nos dirigimos a Fuendetodos. El pueblo natal de Goya presenta un cuidado casco urbano en el que destaca la plaza Mayor, donde se encuentran el museo y la casa natal del pintor. Fuendetodos, situado en el interfluvio Aguasvivas-Huerva y a 44 kilómetros de la capital, goza hoy día de un gran atractivo turístico gracias a la fama mundial de Goya.

Una vez repuestas las fuerzas, el regreso se inició por el mismo camino hasta llegar a Torrecilla de Valmadrid, donde el paisaje es aún más seco si cabe y cuyos caminos dejan ver su formación de piedra y yeso. Un pronunciado descenso nos conduce hasta la carretera comarcal que enlaza con la nacional 232 (Zaragoza-Alacañiz) muy cerca ya de Zaragoza, principio y fin de nuestra ruta.