Consejos para viajar en verano
–Revisar el nivel de refrigerante en el bote de expansión, sin olvidar también revisar el nivel de aceite, ya que es igualmente fundamental para la refrigeración del motor.
-Ten cuidado al aparcar en una zona con rastrojos o monte tras una circulación prolongada: el contacto del tubo de escape con la maleza o ramas secas pueden provocar un incendio.
-Durante el viaje, estar pendiente de los testigos de la temperatura, especialmente en atascos y retenciones. Si el coche sufre un sobrecalentamiento, parar en lugar seguro lo antes posible, apagar el motor y no tocar nada del mismo por riesgo de quemaduras con el motor o de líquidos. Llama a la asistencia lo antes posible. Si ya te ha sucedido varias veces, lo mejor será llevar una garrafa con agua o refrigerante en el maletero y añadir ¡cuando ya esté frío el sistema!
-El aire acondicionado interfiere directamente en el sistema de refrigeración del coche. Si no funciona bien puede ocasionar que el motor se caliente más rápidamente.
-Vigila la presión, estado y dibujo de los neumáticos, ya que cogen mucha temperatura.
–Evita conducir de forma agresiva, ya que al frenar el calor generado por el roce con las pastillas y el calor exterior hace que su refrigeración sea más difícil, reduciendo la vida útil de las mismas por recalentamiento, así como el del líquido de frenos.
-El calor extremo evapora líquidos y deteriora componentes, por lo que debemos intentar siempre mantener el coche ventilado y aireado, aparcando a ser posible en zonas de sombra.
-Si dejamos el coche expuesto mucho tiempo al sol, debemos proteger el interior con un parasol y un protector de volante, lo que reducirá algo la temperatura interior.
-Antes de iniciar la marcha, dejar las ventanillas y puertas abiertas durante 30 segundos, y posteriormente encender el climatizador.
–Evitar viajar en las horas de más calor del día, sobre todo si viajamos con niños, con personas mayores e incluso con animales de compañía, que sufren mucho.
–Proteger las ventanillas traseras con protectores solares, para evitar el sol directo. Combate el calor con ropa cómoda y transpirable, gafas de sol y haz paradas regulares en largos viajes para descansar e hidratarte.
-Mantener una temperatura en el interior del habitáculo entre 21 y 22 grados de manera continua, evitando que el chorro de aire nos dé directamente en el cuerpo. Abrir las ventanillas periódicamente para evitar un ambiente muy reseco.