El ‘pequeño Káiser’ partió desde el primer puesto de la parrilla, como en las ediciones de la prueba de 2011 y 2012 en el país asiático, pero a diferencia de aquellas en esta ocasión necesitó un tercio de carrera para afianzarse en el liderato.
Una vez a la cabeza de la carrera, el alemán condujo cómodamente hasta conseguir su décimo triunfo de la temporada, número 36 en su corta trayectoria, a su cuarto mundial consecutivo y a la historia de este deporte.
El español Fernando Alonso (Ferrari), que partió desde la octava posición, necesitaba una tarde heroica en la India, pero en la primera curva sus esperanzas se diluyeron cuando su monoplaza chocó con dos coches y tuvo que parar a reemplazar el alerón delantero.
De esta forma quedaba fulminada la estrategia del español con neumáticos medios, mientras la mayoría de los demás pilotos salió con blandos, incluido Vettel.
En cualquier caso al alemán le bastaba un quinto puesto en un circuito donde siempre había conseguido la pole y la victoria para lograr el título.
Con su undécimo puesto unido al cuarto de su compañero Felipe Massa ha permitido a Mercedes superar por cuatro puntos a Ferrari en el Mundial de Constructores, gracias al segundo puesto de Nico Rosberg y al sexto de Lewis Hamilton a falta de tres carreras.
Alonso y su Ferrari aguantaron el ritmo de Vettel y su Red Bull la primera mitad de la temporada, pero la meteórica recta final del campeón alemán sellaron las opciones del bicampeón mundial.
Desde su abandono en el Reino Unido, el ‘pequeño Káiser’ ha sumado siete victorias en las últimas ocho pruebas en disputa, seis de ellas consecutivas.
A falta de tres carreras, Vettel es con 36 triunfos el cuarto corredor en número de victorias tras leyendas como Michael Schumacher (91), Alain Prost (51) y Ayrton Senna (41), y es el tercero que más poles acumula (43), por detrás de Schumi (68) y del brasileño (65).
El de Heppenheim podría igualar este campeonato las 13 victorias en una sola temporada logradas por Schumacher en 2004.
En el podio acompañaron a Vettel, Rosberg, que aguantó la segunda posición de partida, y un espectacular Romain Grosjean (Lotus).
El francés se subió por tercera vez consecutiva al tercer peldaño del podio gracias a una vibrante carrera en la que arrancó decimoséptimo y con estos puntos impulsa a la escudería británica en la lucha por el segundo puesto de constructores, por el que pelean también Ferrari y Mercedes.
La pista india de Buddh, que debutó en 2011, desaparecerá en 2014 del calendario, y aunque el patrón de la F-1, Bernie Ecclestone, ha dejado la puerta abierta a un posible regreso en 2015, entre las escuderías y los pilotos reina el escepticismo.
Este Gran Premio, en el que solo Vettel ha inscrito su nombre en las poles y las carreras, se despide así temporalmente y deja un gran sabor de boca al de Heppenheim.