Enorme familiar de lujo
Skoda ha dado en el clavo con el lanzamiento del Superb Combi, un familiar que se ha convertido en la referencia de su categoría y que, en cuestiones de espacio, sólo es superado por el lujoso, y mucho más caro, Mercedes Clase E Estate. Con sus 633 litros de capacidad de maletero -ampliables a 1.865 litros si se abaten los asientos traseros- y su interior de brillante factura, el familiar más capaz del Grupo VW no se acompleja frente a rivales “Premium” como el veterano Audi A6 Avant; y ni siquiera tiene miedo a otros tan recientes como el BMW Serie 5 Touring o a familiares tan consagrados como el Volvo V70. No obstante, quizá el rival más directo de nuestro protagonista de hoy sea el exitoso Volkswagen Passat Variant, pero por un precio similar el Skoda ofrece más espacio y una línea más actual.
Para esta prueba tomamos la versión 2.0 TDI 170 cv Exclusive con cambio manual, que tiene un precio de 34.320 €. Sus terminaciones son sensacionales, con elementos de serie tales como la tapicería de cuero, los faros bixenón adaptativos o las llantas de aleación de 18 pulgadas entre otras cosas. Para quien no sea tan sibarita pero requiera la potencia de este contundente propulsor diesel, es posible decantarse por el acabado Ambition, bastante más sencillo pero por un precio de 30.540 €. O, al contrario, quien desee mayor despliegue tecnológico puede optar por este Superb Combi 2.0 TDI 170 Exclusive bien con tracción integral 4×4 (36.340 €) o bien con tracción delantera pero combinada con el eficaz cambio automático DSG (36.100 €).
Estamos por tanto ante un familiar con una gama muy bien estructurada, que en versiones como esta Exclusive ofrece un lujo y unas comodidades más propias de las marcas conocidas como “Premium”. Del motor poco nuevo podemos decir, ya que lo hemos probado en diversos modelos del Grupo VW, entre ellos en el Superb berlina, pero no está mal recordar que tiene un rendimiento tan logrado que hasta en un coche de estas dimensiones (4,84 metros de largo) y peso (1.577 kilos) es capaz de permitirle unas prestaciones fabulosas (220 km/h y 8,9 segundos de 0 a 100 km/h) combinadas con unos consumos y unas emisiones bastante contenidos (5,9 l/100 km y 155 g/km de CO2).
Como veremos en las siguientes páginas su comportamiento raya a gran altura, aunque, evidentemente, dadas sus proporciones y su conservador tarado de suspensiones no sea un automóvil con el que practicar una conducción deportiva. Aún así, el Superb Combi no se descoloca en ningún momento, y hace gala de una pisada firme y segura, todo ello conjugado con un mimo sobresaliente a los ocupantes. Se trata de un vehículo en el que “los kilómetros no cansan”, ni en las plazas delanteras ni en los enormes asientos traseros. Ya puestos a viajar con tanto confort, nos hubiese gustado contar con el cambio DSG (1.780 euros), que hace la conducción mucho más deliciosa; aunque somos conscientes de que todavía quedan muchos conductores que prefieren el cambio manual convencional de toda la vida.
Estéticamente el Skoda Superb Combi es un automóvil muy equilibrado. Su terminación trasera convence tanto por sus modernos y armónicos trazos como por sus prácticas proporciones. De hecho, no es de extrañar que un buen porcentaje de conductores prefieran el diseño del Combi antes que el del Superb sedán (y eso que el sedán cuenta con la inteligente solución del sistema de doble apertura de maletero). Las medidas son iguales tanto el longitud como en anchura, aunque el Combi es ligeramente más alto, e incluso si contamos las barras de techo gana 5 cm sobre el sedán, llegando a los 1,51 metros.
La habitabilidad y el espacio para la carga son dos argumentos más que convincentes para decantarse por este modelo en lugar de por otros de la competencia. El espacio que existe en las plazas traseras es espectacular, pues parece casi una limusina o una berlina de representación. Cualquier persona de cualquier talla encontrará buen acomodo en este coche. Y del maletero, además de los excelentes datos de carga (633/1.865 litros), decir que cuenta con soluciones inteligentes y prácticas tales como los raíles con sistema de sujeción de aluminio, además de ganchos y espacios ocultos laterales. También existe un “doble fondo” en el que esconder maletines u objetos de un volumen reducido. Se trata de un maletero espectacular, y, además, cuando levantamos la última de las “capas” nos llevamos la sorpresa de encontrar una rueda de repuesto de tamaño convencional. Sencillamente sensacional.
En la parte delantera el diseño del salpicadero es idéntico al del modelo sedán, es decir, sin grandes alardes estilísticos pero con abundantes elementos de información, una pantalla táctil central de grandes dimensiones (tenga o no tenga navegador) y unas terminaciones de alta calidad. Además, acabados como este Exclusive rizan el rizo con unos asientos de cuero con regulación eléctrica o un equipo de sonido de 10 altavoces entre otras cosas.
Finalmente decir que entre la equipación estándar cuenta también con retrovisores exteriores eléctricos, sensores de lluvia y luz, monitor de presión de neumáticos, sistema de ayuda al aparcamiento con avisos acústicos y visuales en pantalla o sistema de ayuda al arranque en pendientes entre otras cosas. Nuestra unidad de pruebas completaba este exquisito conjunto con extras como la apertura eléctrica del portón trasero (420 €), uno de los extras más recomendables junto a los airbags laterales traseros (300 €) o los cuatro asientos calefactables (480 €).
Rendimiento sobresaliente
El Skoda Superb Combi 2.0 TDI 170 cv es un coche grande pero con un peso bastante contenido (1.577 kilos), por lo que su conducción no resulta “pesada”. El buen hacer del chasis, y un tarado de suspensiones que premia el confort pero sin perjudicar apenas el dinamismo, consiguen que el comportamiento de este coche obtenga una nota muy elevada. Se percibe claramente que llevamos un coche grande, pero conserva un razonable grado de agilidad y permite ir rápido con total seguridad.
La caja de cambios manual de seis velocidades está bien escalonada y se maneja con precisión, aunque ¡va tan bien el DSG! que siempre que probamos un coche del Grupo VW lo echamos de menos. Por prestaciones y consumos este coche es de lo mejor del mercado, y por sonoridad y vibraciones esta última evolución 2.0 TDI 170 cv con sistema “common rail” le ha permitido posicionarse en un buen lugar frente a la competencia.
Las cifras hablan por sí solas, y un consumo medio de 5,9 l/100 km para un coche de su tamaño y peso es un registro más que bueno. Además su dato de emisiones de CO2 es bastante reducido, lo cual también beneficia a su impuesto de matriculación. Las prestaciones tampoco desmerecen en absoluto, pues los 8,9 segundos que emplean en el 0 a 100 km/h dan buena prueba de sus rápidas reacciones. De hecho, es tan rápido, que para determinados perfiles de conductores el TDI 140 cv (unos 2.500 euros más barato) será más que suficiente.