El ‘Supermegane’ de 360 cv
Ya conocemos a los dos primeros integrantes de la tercera generación del Megane: el Megane 5p, que llegará en noviembre, y el Megane Coupe, para el que habrá que esperar unos meses más. También sabemos que en 2010 la gama se completará con otros cuatro modelos, entre familiares y descapotables. Pero hoy nos toca hablar de otro integrante de la nueva generación Megane, del que sólo se venderán unas pocas decenas de unidades y con el que no se podrá circular por la carretera. Nos referimos al espectacular bólido de carreras Megane Trophy.
Este monstruo de la competición ya es conocido en los circuitos internacionales, pues lleva cuatro años dando guerra como la berlina protagonista del las World Series by Renault. El primer Megane Trophy nació en 2005, a la vez que esta prestigiosa disciplina automovilística en la que también se incluyen dos clases de de monoplazas (los 2.0 y 3.5) y por los que han pasado pilotos como Robert Kubica o Sebastian Vettel.
El Renault Megane Trophy, tanto el anterior como el que hoy presentamos, en realidad no deriva del Megane de calle, ni por chasis ni por mecánica, y únicamente monta una carrocería de fibra con los rasgos del modelo de calle: el anterior con las señas de identidad del Megane II, y el de 2009 con el estilo del nuevo Megane Coupe. Lo cierto es que se trata de un vehículo nacido exclusivamente para los circuitos, con chasis tubular, propulsión trasera y motor V6 colocado en posición central-trasera.
Nuestro protagonista, que ya está listo para 2009, cambia radicalmente su aspecto exterior y mejora tanto la potencia como la aerodinámica. Con una nueva carrocería todavía más espectacular que la de su predecesor, se estima que la ganancia aerodinámica es de un 40%, gracias al nuevo “splitter” delantero que canaliza el caudal de aire hacia unos extractores, y al conjunto de difusor y alerón trasero que mejora el efecto suelo. La nota exótica la ponen las puertas, que ahora se abren hacia arriba.
Por lo que se refiere a mecánica, el “corazón” de esta bestia de los circuitos sigue siendo un 3.5 V6 que va asociado a una caja de cambios semiautomática con levas tras el volante. Pero la potencia ha aumentado hasta los 360 cv (antes 320 cv) gracias, en parte, a la mejora de la admisión que le proporciona la toma de aire del techo. Sus neumáticos son de la marca Michelín, los amortiguadores regulables y el peso total del vehículo muy contenido: 955 kilos. Las armas de siempre, unidas a la mecánica y la aerodinámica mejoradas, permitirán el nuevo Megane Sport Trophy lograr unos tiempos por vuelta similares a los Porsche 911 GT3 Cup; o al menos eso es lo que calculan los ingenieros de Renault.
El concepto de coche de carreras con la mejor relación “precio-prestaciones” sigue siendo el objetivo principal de Renault. Ya no sólo en el coste de adquisición (el anterior costaba unos 100.000 euros), sino en su mantenimiento, ya que, por ejemplo, las revisiones profundas no hay que realizarlas más que cada 5.500 km, un periodo muy largo para un coche de alta competición. La aparición de esta nueva evolución no supone que los equipos que venían participando estos últimos años deban cambiar de coche, pues basta con comprar el kit que Renault Sport comercializará a finales de año para transformar el “viejo” Megane Trophy en un flamante Megane Trophy 2009.