En el recientemente clausurado Salón del Automóvil de Barcelona   se presentaba el Opel   Insignia OPC, la realización más radical y deportiva   de la moderna berlina alemana. Por otra parte, Opel acaba de lanzar el familiar   Insignia   Sports Tourer, que incluye una potente versión 2.8 Turbo de 260 cv.   Pero no contentos con ello, los responsables de la marca anuncian que a   finales de año se pondrá a la venta también el   Opel Insignia Sports Tourer OPC de nada menos que 325 cv,lo que le permitirá alcanzar los 250 km/h y acelerar   de 0 a 100 km/h en 6,3 segundos.
 Pocas marcas son las que ofrecen en sus gamas   una variante familiar de tan elevada potencia. De hecho, por   encima de la barrera de los 300 cv, sólo encontramos al que seguramente   será su rival más directo el VW   Passat R36 Variant- y al eterno trío alemán de lujo con las   versiones station wagon más potentes: Audi   S4 Avant, BMW   335i Touring y, por encima de todos ellos, el Mercedes   C63 AMG Estate.
Así las cosas, con el nuevo Opel Insignia OPC Sports Tourer se combinan   unos interesantes ingredientes, como los son sus 325 cv, la   tracción 4×4 y los 1.530 litros de capacidad   de carga. De hecho, Opel tiene ya bastante experiencia en comercializar   familiares de alta potencia, pues si en la década de los 90 contaba con   el Omega Caravan V6 de 204 cv, hasta hace poco tenía también en   sus filas al   Vectra OPC SW de 255 y 280 cv.
 El coche en cuestión tendrá de momento únicamente caja   de cambios manual de seis velocidades, que combinará   con la transmisión Adaptative 4×4 con diferencial electrónico   trasero eLSD recalibrado, frenos Brembo sobredimensionados   y suspensión regulable de tres modos de uso FlexRide   rebajada en 10 mm. Se trata de un familiar muy deportivo que estos   días los pilotos probadores y los ingenieros de Opel están poniendo   a punto en el famoso y exigente circuito alemán de Nurburgring.