Mercedes Clase E

Mercedes Benz presenta en el Salón del Automóvil de Nueva York (del 14 al 23 de abril) su nuevo Clase E. En realidad no es una nueva generación, sino la llegada de un equipamiento mejorado, motores optimizados, un ligero restyling y nuevas combinaciones de colores y tapicerías. Se pondrá a la venta en Europa en el mes de junio, y la gama la compondrán 29 versiones, 16 de la carrocería sedán y 13 de la familiar Estate. Por lo que se refiere a sus motores, de los diez existentes seis se han potenciado, aunque sólo uno de ellos ha cambiado de denominación: el AMG.

El nuevo techo de la gama y modelo más deportivo es el E63 AMG, el cual con un motor V8 atmosférico de 514 cv y 630 Nm de par jubila al anterior E55 AMG con compresor de 476 cv. El resto de la gama mantiene su denominación comercial, pero sólo los E280 y E350 en gasolina, y los E280 CDI y E420 CDI en diesel, permanecen invariables. A los que más falta les hacía el incremento de potencia -ante la creciente competitividad del segmento- era a los básicos turbodiesel E200 y E220 CDI. El primero de ellos gana 14 cv y el segundo 20 cv, para situarse en 136 cv y 170 cv respectivamente. En ambos casos el consumo medio es de sólo 6,3 l/100 km. Por lo que se refiere al E320 CDI, éste mantiene los 224 cv de potencia, pero eleva el par de 510 a 540 Nm.

La gama de gasolina, además del nuevo AMG ya mencionado, mejora su escalón de acceso E200K, elevando la cifra de potencia máxima de 163 a 184 cv. Pero de todos los motores de la nueva Clase E el más beneficiado sin duda es el V8 del E500, el cual cambia a su veterano 5,0 litros de 306 cv por un nuevo 5,5 litros de 388 cv. También el par motor aumenta considerablemente de 460 Nm a 530 Nm- y del mismo modo las prestaciones, ya que baja 0,7 segundos en la marca de aceleración de 0 a 100 km/h: ahora 5,3 segundos.

Estéticamente, para distinguir al Mercedes Clase E, que se pondrá a la venta en junio, del modelo vigente hasta ahora, hay que fijarse muy bien, ya que tan sólo unos trazos un tanto más afilados de la parrilla y el spoiler delanteros le delatan. También los grupos ópticos han sido modificados, los cuales además incluyen nuevas funciones de alumbrado, como las luces de freno con diodos y de intensidad variable o los faros que giran en las curvas de segunda generación.

Algunos elementos de seguridad han sido igualmente mejorados, como el reposacabezas activos o el sistema que prepara al conductor en caso de accidente. Y en el chasis, sutiles modificaciones, como una dirección un 10% más directa, o ligeros retoques en suspensión y caja de cambios manual completan las novedades del nuevo Clase E. Por último, citar las nuevas combinaciones de tapicerías y colores, así como el diseño del volante, que ha variado. En definitiva, un ligero restyling y retoques en la mecánicas y equipamiento para seguir unos años en la cima de las berlinas de lujo.

Enrique Marco, Autocity
17 de Abril de 2006