Lotus introduce importantes novedades en su roadster Elise, ese biplaza puramente deportivo de los que ya quedan pocos. Desde este mes se lanza una nueva versión sobrealimentada denominada Elise SC que promete unas sensaciones de conducción increíbles. Si sólo nos fijamos en su potencia (220 cv) y en su precio (unos 70.000 euros) podríamos pensar que no se trata de un superdeportivo, pero estudiando a fondo sus soluciones técnicas, y teniendo en cuenta su escasa difusión, su radical planteamiento y su amplísima historia en competición, podemos comprobar que estamos ante uno de los deportivos más excitantes del mundo. Ni un Porsche Boxster, ni un BMW Z4, ni un Nissan 350 Z Roadster son ni la mitad de radicales que este purasangre británico. Ocurre lo mismo con la versión cerrada Exige (ahora potenciada a 240 cv), la cual tiene variantes como el GT3 que superan a grandes deportivos mucho más caros y potentes.
Exteriormente el Lotus Elise SC se diferencia por las nuevas llantas de garganta más ancha y diferente diseño, el alerón posterior y diversos retoques estéticos y de equipamiento que afectan a toda la gama Elise 2008; como la alarma con inmovilizador, nuevos indicadores en el cuadro de mandos y airbags de serie. Opcionalmente se simplifican los packs, entre los que encontramos elementos como el control electrónico de tracción, diferentes combinaciones de piel para el habitáculo, puesta a punto más deportiva o equipo de música con conexión a iPod entre otras cosas.
Por lo demás, en cuanto a planteamiento de chasis pocas novedades. Una corta batalla de 2,30 metros y unas contenidas medidas de 3,78 metros de largo, 1,12 metros de alto y 1,72 metros de ancho. El habitáculo tiene dos únicas plazas y un limitado maletero de sólo 112 litros, pero es que estamos ante un roadster radical, no ante un coche para todo uso. Sí que cambian las llantas en este nuevo Elise SC, que ahora son de 17” de diámetro y llevan garganta de 8” de anchura, para neumáticos Yokohama AD07 LTS 225/45 R17. Además, el peso aumenta ligeramente, hasta llegar a unos contenidos 903 kilos.
Y la principal novedad del nuevo tope de gama en los Elise es la sobrealimentación. Se parte del mismo motor 1.8 VVTL-i que en el Elise R ya daba 192 cv, pero gracias a la alimentación forzada se llega a los 220 cv. Dicha potencia, combinada con el liviano peso antes descrito se traduce en unas prestaciones impresionantes, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos y de 0 a 160 km/h en 10,7 segundos. El consumo no es nada desorbitado, con 9,1 l/100 km de media, y la velocidad máxima llega a los 240 km/h.