Los ingenieros de Ferrari han confeccionado su ‘berlinetta’ más radical, potente y rápida. Se trata del F12tdf, derivado del F12berlinetta. A diferencia de éste, una serie de evoluciones en carrocería, interior, motor, transmisión y tren de rodaje, así como una mayor utilización de fibra de carbono en distintos componentes, hacen del útlimo súper deportivo del ‘Cavallino’ el coche homologado para calle más depurado en circuito.Evoluciones en todos los apartados
Así lo acreditan sus números. El motor de 6.262 centímeros cúbicos del F12berlinetta (12 cilindros en V con una inclinación de 65°) cuenta en el F12tdf con nuevos elementos (unos tubos de admisión de geometría variable utilizados en los Fórmula 1, dice literalmente Ferrari en el comunicado) para aumentar la potencia máxima de 740 a 780 CV a 8.500 rpm (potencia específica de 125 CV/l) y la de par motor hasta los 705 Nm (frente a 690 Nm) a 6.750 rpm, con un 80% ya está disponible a 2.500 rpm, estirando hasta el corte de inyección (8.900 rpm) sin desfallecer.
Estas diabluras mecánicas se traducen en unas prestaciones supersónicas: acelera de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos, tarda en alcanzar los 200 km/h desde parado 7,9 segundos y es capaz de obtener una velocidad máxima de 340 km/h. La vuelta al circuito de la marca, Fiorano, la completó en 1 minuto y 21 segundos. Para obtener este rendimiento ha sido fundamental contener el peso del F12tdf, 110 kilogramos menos que el F12berlinetta en el que se basa; en total, 1.415 kilogramos (peso en vacío) en un coupé que mide 4,66 metros de largo.Ferrari ha trabajado en incrementar la eficiencia volumétrica en altas revoluciones del V12
Además, el Ferrari F12tdf ha experimentado una mejora aerodinámica en comparación con el F12berlinetta. De este trabajo se beneficia la vista -el diseño de la carrocería resulta mucho más agresivo si cabe-, pero sobre todo el comportamiento del vehículo. Gracias a diferentes avances como el Aerobridge, un puente situado en el lateral frontal, o al alerón trasero, que es 60 milímetros más largo y 30 milímetros más alto, el F12tdf se pega literalmente al suelo en cada paso por curva y logra una estabilidad lineal más propia de los automóviles de competición.De su diseño, más agresivo, se obtiene una mayor carga aerodinámica
Otros cambios importantes en el chasis son un nuevo juego de neumáticos, asimétricos como todo coche de altas prestaciones que se precie: más pequeños delante (275/35 R 20′) que detrás (315/35 R 20′). También se incluye el sistema de dirección en las ruedas traseras (Virtual Short Wheelbase) que mejora su respuesta y lo hace más ágil en una conducción deportiva. Un cambio manual pilotado F1 DCT específico y más rápido en el paso de marchas y los frenos Extrem Design heredados del LaFerrari, coronan la puesta en escena del Ferrari F12tdf.
Su volumen de producción limitado de 799 unidades se debe, según Ferrari, a la ‘exclusividad de un coche conmemorativo como éste’. Y es que la marca italiana pretende con este F12tdf homenajeara la mítica carrera de resistencia Tour de France que en la década de los 50 y 60 encumbró a otra berlinetta, al ‘dios griego de los Ferrari’, el 250 GT, que consiguió imponerse en cuatro ediciones consecutivas.