El avance en potencia de los motores diesel durante los últimos años ha sido bestial. Hace tan solo una década, prestigiosos todoterrenos de las mejores marcas tenían como tope de gama en diesel versiones de 130 a 160 cv; en 2002 Volkswagen sorprendió a propios y extraños y se destacó claramente del resto al presentar el TT diesel más poderoso del momento, el Touareg V10 TDI de 313 cv; pero ahora viene Audi –eufórico tras el éxito de su bólido R10 TDI en las 24 Horas de Le Mans- y presenta el Q7 V12 TDI de 500 cv, con el que fulmina todos los récords anteriores. Tardará más de un año en estar listo para la venta, pero en ese momento se convertirá en el vehículo de calle diesel más potente del mundo.
La tecnología empleada en esta nueva joya mecánica es elevadísima, y registra cifras jamás alcanzadas por ningún otro motor, como una presión de alimentación de hasta 2,6 bar, gracias a su nuevo sistema common rail de Bosch con los inyectores piezoeléctricos que tanto proliferan últimamente. Conceptualmente estamos ante un motor V12 a 60 grados que cubica 5.934 cc y se alimenta de dos turbos. La potencia de 500 cv asusta, pero los 1.000 Nm de par entre 1.750 y 3.000 rpm dan buena muestra de la fuerza de este mastodonte. Además de semejante alarde de potencia, Audi se permite el lujo de ofrecer unos consumos nada escandalosos (11,9 l/100 km de media) y un bajo nivel de emisiones contaminantes que se adelanta al futuro y cumple incluso la norma Euro 5 que entrará en vigor en 2010.
Evidentemente lleva el sistema de tracción total Quattro y una caja de cambios Tiptronic, aunque reforzada para soportar tanta fuerza; así como los frenos, que también se han sobredimensionado. Aún con el inconveniente de su elevado peso, sin desvelar, pero que a buen seguro no bajará de las 2,5 toneladas, el Audi Q7 V12 TDI puede pasar de 0 a 100 km/h en 5,5 segundos y alcanzar fácilmente los 250 km/h (velocidad máxima limitada electrónicamente). Cuando salga a la calle el Q7 V12 TDI no tendrá rival, sólo algunos modelos de gasolina como el Mercedes ML 63 AMG o el Porsche Cayenne Turbo S podrán echarle el guante.
De precios, como falta mucho para el inicio de su comercialización, todavía no se ha hablado, pero podría rondar los 120.000 euros. Como es lógico llevará todo el equipamiento y lujo esperado en un vehículo de esta marca y de su nivel, y además se distinguirá del resto de la gama Q7 por unos nuevos paragolpes delantero y trasero, tomas de aire más grandes y llantas de un gran diámetro con neumáticos muy anchos.