Un informe de carreteras revela que se ha erradicao un 84 por ciento de tramos peligrosos
Dicho informe concreta que los kilómetros de máximo riesgo llamados ‘tramos negros’ han tenido también una fuerte reducción, ya que han pasado de 521 kilómetros en 2008 a los 34 kilómetros del último informe.
Asimismo, se subraya el análisis de los 24.350 kilómetros de la red estatal de carreteras y se apunta a una serie de tramos que suman 385 kilómetros, todavía con puntos peligrosos para la circulación vial, cuando hace cuatro años este registro era de 2.350 (-83,6 %).
Los tramos de la red en función del Índice de Riesgo revelan que un 89,8 % de los mismo ofrece un riesgo bajo o medio-bajo, y un 1,8% un riesgo medio-alto.
En comparación con el informe anterior, se observa una reducción en los tramos de riesgo alto y medio-alto, pues se ha pasado del 4,7 % al 1,8 % en la ultima evaluación.
En estos 33 tramos de riesgo, que representan un total de 386 kilómetros de carreteras, se producen cada año una media de 15 accidentes mortales y 58 graves, que provocan cada año 16 muertes y 80 heridos graves.
Por el contrario, aumentan del 34,2 % al 39 % el número de tramos con riesgo bajo, lo que también significa una mejora en la seguridad de las vías
Los tramos de mayor riesgo son la N-640 en Lugo, entre los kilómetros 36 y 57, con una Intensidad Media de Vehículos (IMD) de 2.043, y la N-632 en Asturias, entre los puntos kilométricos 53,4 y 65, con un IMD de 2.159.
El perfil de tramo con nivel de riesgo elevado correspondería a una carretera convencional de calzada única, con intersecciones al mismo nivel y con una IMD por debajo de 10.000 vehículos/día (todos los tramos negros corresponden a carreteras con entre 2.000 y 10.000 vehículos día).
En esta favorable evolución ha influido que el número de kilómetros de autopistas y autovías se ha incrementado un 50 %, pasando de 4.400 a 6.600 kilómetros en la actualidad.
Los resultados de este informe se computan conforme a un ‘Índice de Riesgo’, definido como el número de accidentes mortales y graves ocurridos en un tramo por cada 1.000 millones de vehículos/kilómetro.
Estos datos se han distribuido entre autopistas y autovías, carreteras ordinarias y preferentes.