Informe toxicológico halla restos de droga en la saliva, pero no en la sangre
Rueda ha asistido, junto al delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, a una jornada de prácticas con motos en un centro único de este tipo en el país, en la que también se explica cómo se reconstruyen los accidentes de carretera.
Ha agregado que el informe se elabora en Badajoz mientras que en la Escuela se colabora con el equipo de Atestados del subsector de Tráfico de Badajoz.
También ha explicado que, en todo caso, el suceso es investigado judicialmente en Castuera y que confía cree que los informes de Tráfico ‘no tarden mucho’.
A su vez, el delegado ha explicado que desconoce si hay nuevos datos sobre la investigación del accidente de Castuera en el que murieron cinco niños en el accidente de un minibús porque ‘ya no está en manos’ de la Delegación del Gobierno sino de la jueza de Castuera, a lo que ha agregado que se trabaja rápidamente para que el caso se solucione lo antes posible.
‘Este accidente -ha continuado- se produjo y vamos a intentar que no se vuelva a producir ninguno más de este tipo en Extremadura’.
El Servicio de Toxicología del Instituto de Ciencias Forenses de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) envió el pasado viernes al juzgado número 2 de Castuera (Badajoz) el resultado del análisis de las muestras tomadas al conductor de la excavadora, en prisión tras el accidente en el que murieron cinco jóvenes.
Fuentes del centro compostelano, de referencia en España para estos análisis, confirmaron a Efe esta remisión por fax, tras el pertinente estudio que se ha realizado en un plazo menor al habitual dada la alarma social que ha provocado el suceso.
No obstante, no han precisado si este hombre había consumido drogas. Únicamente han constatado que a las dos de esta tarde, el profesor Manuel López Rivadulla y su equipo enviaron el informe de los análisis de las muestras biológicas recibidas el día 14 de este mes.
También han especificado que dichas muestras fueron procesadas de acuerdo con los protocolos habituales, por técnicas de espectometría de masas en tándem, previa separación por cromatografía de líquidos.
El test de saliva -indiciario- fue la primera prueba realizada para saber si el conductor de la máquina, F.M.M., de 37 años, había consumido alguna droga previamente al accidente con el microbús en el que viajaban los chicos.
Esta fue la primera prueba practicada y, aunque tiene una ‘fiabilidad aceptable’, tenía que ser contrastada con la realizada en este laboratorio de referencia, la que confirma ‘específicamente y de manera inequívoca’ la presencia de sustancias detectadas en primera instancia.