El Gobierno de EE.UU. acelera su salida de General Motors
El Tesoro envió esta semana al Congreso su informe regular sobre la gestión de la intervención que, en 2009, dio al Gobierno de EE.UU. el 61 por ciento de la mayor fabricante de automóviles.
En diciembre pasado el Gobierno del presidente Barack Obama indicó que retiraría gradualmente su inversión en GM en un plazo de doce a quince meses.
Para entonces, a fin del año pasado, el Gobierno de EE.UU. tenía en sus manos unos 500 millones de acciones de GM, y la empresa readquirió 200 millones. En febrero el Tesoro vendió 17,2 millones de acciones.
En abril el gobierno vendió 58 millones de acciones y obtuvo alrededor de 2.000 millones de dólares con esa transacción.
El Departamento del Tesoro vendió en abril otros 30 millones de acciones, recuperando 1.030 millones de dólares para los contribuyentes, como parte del retorno de General Motors al Índice Standard and Poor de 500 acciones.
La participación de los gobiernos de Estados Unidos y Canadá en General Motors fue parte de los programas para el salvamento de la compañía y su reorganización al amparo de los acreedores.
La venta de julio involucró entre 135 millones y 137 millones de acciones valuadas entre 34 y 37 dólares cada una.
Al ritmo actual el Departamento del Tesoro debería sacarse de encima las acciones de GM que le quedan en los próximos seis meses.
Hasta ahora, según el informe del Tesoro, el Gobierno estadounidense ha recuperado 34.600 millones de dólares, lo cual contrasta con los cálculos que en febrero pronosticaban 20.300 millones de dólares en pérdidas.
Pero para que el Gobierno estadounidense ponga fin a su intervención en la empresa sin pérdidas ni ganancias, las acciones deberían subir a unos 95 dólares. Durante todo julio las acciones de GM se cotizaron entre 34 y 37 dólares.
El diario The Detroit News indicó que se cree que el mes pasado el gobierno vendió entre 24 y 26 millones de acciones al precio de mercado, pero ni GM ni el Tesoro confirmaron los precios.