El benjamín de la familia BMW i, esto es, BMW eléctricos, se renueva de cara al verano. Y lo hace con un único, pero profundo cambio: el nuevo i3 2017 incorpora unas baterías de iones de litio de mayor densidad, alcanzando una mayor capacidad (33 kWh) sin necesidad de aumentar su tamaño.
En números exactos, el BMW i3 2017 cuenta con un paquete de baterías (bajo el piso del habitáculo) de 94 amperios/hora (Ah), lo que constituye un aumento superior al 50% en cuestión de autonomía en el ciclo estándar (NEDC) respecto al modelo actual, pasando de 190 a unos notables 300 kilómetros (el Nissan Leaf se oferta en dos versiones, de 200 o 300 kilómetros de autonomía).
Dice BMW que incluso en el uso cotidiano, con condiciones meteorológicas adversas y empleando el aire acondicionado o la calefacción, se puede conseguir una autonomía de hasta 200 kilómetros con una carga de la batería. Mientras, las prestaciones del motor eléctrico síncrono de 170 CV permanecen prácticamente inalteradas, prometiendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos y un consumo de 12,6 kWh/100 km (NEDC).
El BMW i3 actual, con un acumulador de energía de 60 Ah que se oferta desde hace más de dos años, convivirá con el modelo nuevo hasta junio de 2017, existiendo la posiblidad para sus clientes de adaptar la nueva batería (en el marco del programa Retrofit). Además, seguirán vendiéndose en dos variantes, tanto el i3 eléctrico como el i3 Range Extender (extensión de autonomía), cuyo motor de gasolina de dos cilindros mantiene el estado de carga de la batería constante durante el viaje y proporciona una autonomía adicional de 150 kilómetros.
Con la llegada en verano del nuevo i3 (94 Ah), BMW i ofrece, junto a opciones de equipamiento adicionales, nuevas estaciones de carga más potentes para el garaje propio.