El Cadillac de Al Capone
Uno de los automóviles que utilizó el famoso gangster Al Capone ha sido vendido este fin de semana por 277.538 euros en la subasta de St John’s, organizada por RM Auctions en el estado estadounidense de Michigan. El precio pagado por este Cadillac V8 Town Sedan de 1928 ha estado dentro de los márgenes esperados por la prestigiosa casa de subastas, y no ha sido demasiado elevado por diferentes causas, entre ellas las dudas acerca de que realmente perteneciese al conocido mafioso. Y es que la legalidad de la documentación entre los miembros del hampa, lógicamente, queda un tanto en entredicho. No obstante, tanto la casa de subastas RM Auctions, como los anteriores propietarios (el gobierno de EEUU, diversos museos, etc) se han preocupado de buscar archivos policiales, declaraciones de los descendientes del carrocero que lo blindó, noticias y periódicos de la época que efectivamente aseguran que Alfonso Capone utilizó este Cadillac V8.
Fue el pasado fin de semana, en Michigan (USA), cuando el Cadillac V8 de 1928 procedente de un prestigioso coleccionista de coches clásicos recientemente fallecido salió a subasta junto a otros automóviles americanos de la época. En la subasta había otros Cadillac más lujosos y potentes, pero ninguno tenía el “pedigrí” de nuestro protagonista. No obstante, los 277.538 euros que se pagaron por él lo colocaron en el quinto lugar del ranking de cotizaciones de la subasta, muy lejos del automóvil más cotizado de la jornada, un Duesenberg SJ de 1930 por el que se pagó prácticamente el triple. Y ya comparado con otros coches famosos, la cotización del Cadillac de Capone quedó muy baja, sobretodo si nos acordamos de los 3,3 millones de euros que hace dos años se pagaron por el Aston Martin DB5 que Sean Conery empleó en un par de películas del agente 007 a mediados de los 60.
Al Capone (1899-1947) se movía en lujosos automóviles durante los felices años 20. El capo de Chicago poseía también otros Cadillac con el doble de motor -concretamente aquellos Cadillac V16– mucho más ostentosos. Pero dependiendo del recado que fueran a hacer, a los hombres de Capone les interesaba pasar desapercibidos, y la policía de Chicago tenía una amplia flota de Cadillac como este pintados en verde y negro. Así se decoró este V8 de 1928, solo que esta unidad portaba una carrocería blinda y reforzada, con gruesos cristales y una ventanilla trasera abatible (normalmente eran fijas) que supuestamente se realizó así para que los gangsters pudiesen sacar sus armas. Incluso se conserva en el motor de este Cadillac una sirena idéntica a la policial.
Capone fue condenado por evasión de impuestos en 1931. Este y otros coches del grupo mafioso fueron confiscados y, diez años después, cuando Estados Unidos entró en la Segunda Guerra Mundial, el presidente Roosevelt utilizó este coche blindado como medida de protección, ya que por aquella época no era habitual contar con blindajes de este tipo. De hecho no se tiene constancia de coches blindados más antiguos que este; e incluso entre los testimonios recopilados para verificar la autenticidad de la procedencia de este Cadillac V8 está el del hijo del carrocero que lo blindó (Richard Capstran, que hoy tiene 93 años), quien declaró que recuerda como en el taller de su padre se personó el propio Al Capone. El mafioso quedó tan satisfecho del trabajo realizado que pagó el doble de lo acordado y le dio una propina al por aquel entonces niño Richard Capstran.El presidente de los Estados Unidos Roosevelt lo utilizó en 1941 por la protección que le proporcionaba.
Aunque parece bastante claro que este coche era uno de los de la flota de Capone, y que cuenta con el privilegio de ser uno de los primeros automóviles blindados, la cotización del mismo no ha sido muy elevada porque el coche en cuestión no era nada excepcional. De hecho, como decíamos anteriormente, era idéntico a los de una flota policial de Chicago, por que extrapolando en el tiempo es como si hoy en España hablásemos de un Seat Exeo de la Guardia Civil. Y el problema era que al añadir el peso extra del blindaje, los 90 cv del motor V8 asociado a una caja de cambios manual de tres velocidades no parecían ser muy notables para mover con agilidad el coche. Del mismo modo, tampoco frenar el elevado tonelaje del coche sería sencillo con sus cuatro simples tambores. Eso sí, para asistir a las glamourosas fiestas de los años 20 Capone ya tenía sus Cadillac V16, pero para pasar desapercibido en determinadas funciones mucho mejor utilizar este V8 pintado como los coches de la policía.