Para el próximo mes de junio se espera que llegue el nuevo Honda Accord, un modelo que no sólo modifica lo habitual en estos casos (retoques en los faros, paragolpes, llantas, detalles, algo más de equipamiento y pequeños ajustes en los motores), sino que además efectúa cambios en el chasis, la carrocería y mejora sustancialmente el equipamiento y la respuesta mecánica.
Todavía no se han dado datos de medidas, pero el comunicado oficial de Honda asegura que el nuevo Accord es significativamente más ancho y ligeramente más bajo. No se dice nada de la longitud, por lo que seguramente seguirá midiendo 4,66 metros de largo. Con estas modificaciones de carrocería el nuevo Accord se volverá más deportivo, tendencia que se acentúa mucho más en el Accord Tourer. La verdad es que la terminación trasera del actual modelo familiar no resultaba muy agraciada, y con las modificaciones pertinentes ahora será mucho más bonito y moderno.
Técnicamente se asegura que tras el restyling, el Accord tendrá el centro de gravedad más bajo, las vías más anchas y el sistema de suspensiones revisadas. Además se añaden nuevas funciones como la dirección eléctrica adaptable y un completo conjunto de medidas de seguridad activa. Se trata del LKAS (un sistema de alerta de cambio involuntario de carril), el ACC (un control de velocidad activo que mide la velocidad del vehículo que nos precede) y el CMBS (que prepara al vehículo y avisa al conductor cuando hay peligro de colisión inminente).
En la parte mecánica seguirá habiendo tres versiones, dos de gasolina y una diésel. El 2.0 i-VTEC es el que menos cambia, pues con sus 156 cv mantendrá sus prestaciones, aunque reduce algo los consumos. El motor gasolina de 2,4 litros desarrolla ahora 200 cv (10 cv más) a 7.000 rpm y 233 Nm (10 Nm más), gracias a una relación de compresión aumentada y a una distribución mejorada con válvulas más grandes.
Pero la gran novedad es el motor diésel, que de paso cambia de denominación. Si ya el actual 2.2 litros i-CTDi de 140 cv gustó mucho, ahora se lanza un nuevo 2,2 litros i-DTEC que mejora el rendimiento y conserva la finura del anterior. Tiene 150 cv de potencia y 350 Nm de par, y ha recibido la última tecnología en inyectores piezoeléctricos. Por último, decir que las cajas de cambio serán manuales de seis velocidades de serie, y, opcionalmente, los de gasolina podrán llevar un cambio automático de cinco velocidades con mandos en el volante.