El finés Jari-Matti Latvala, compañero de equipo y máximo rival para el título, finalizó segundo a 11.3, mientras que el también finlandés Mikko Hirvonen (Ford) completó el podio final de la duodécima cita puntuable para el Campeonato del mundo de rallys, a 1 minuto y 42.2 segundos de Ogier.
Latvala ganó el Power Stage final, sumando los tres puntos extras. Kris Meeke fue segundo con el Citroën DS3 WRC, mientras que Andreas Mikkelsen sumó un punto tras terminar tercero con su Polo R WRC.
Ogier fue tercero en el tramo de La Mussara y segundo en Riudecanyes, y aunque ambos los ganó Jari-Matti Latvala, Ogier afrontó los dos últimos tramos con una renta de 21.9 segundos, suficiente para anotarse el título sin demasiados problemas.