Un trazado, ahora propiedad de Red Bull y rebautizado como Red Bull Ring, que sobresale por ser muy rápido gracias a sus cuatro largas rectas y mantiene prácticamente las mismas características que tenía como A-1 Ring entre 2000 y 2003.
Con un circuito en el que la potencia en recta es fundamental, los coches de Mercedes deberían volver a reinar, siempre que superen los problemas de fiabilidad que condenaron al británico Lewis Hamilton en Canadá, que abandonó en la vuelta 46 por problemas en los frenos, y afectaron también al líder del Mundial, el alemán Nico Rosberg, segundo en Canadá tras Ricciardo por problemas de potencia.
A la espera de saber si Mercedes soluciona los problemas que tuvo en la pasada carrera, la escudería Red Bull, en su circuito y con la reciente victoria de Ricciardo, primer piloto que desafía el dominio de los coches plateados en esta temporada, aspirará a luchar por otra victoria, vista su evolución en las últimas pruebas.
Quienes seguirán siendo una incógnita son los coches de Ferrari, que pese a esperar una nueva evolución del F14T para Canadá, se vieron de nuevo relegados a la parte baja de la zona de puntos, con el español Fernando Alonso séptimo tras la bandera a cuadros, y el finlandés Raikkonen décimo.
Una de las sorpresas de la pasada carrera en Montreal, el mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez (Force India), que sufrió un espectacular accidente al ser embestido por detrás por el brasileño Felipe Massa (Williams) en la última vuelta, tendrá que arrancar con cinco puestos de penalización en esta carrera, al considerar los comisarios que tuvo culpa del accidente al cambiar su trayectoria.
Precisamente Massa, además de Alonso, Raikkonen y el británico Jenson Button (McLaren) configuran el cuarteto de pilotos en activo que han corrido en el trazado austríaco.
De los cuatro, ninguno de ellos ha logrado la victoria en Spielberg, aunque el que más cerca estuvo fue Raikkonen, con su segundo puesto en 2003 a los mandos de un McLaren y por detrás de Michael Schumacher, ganador en las dos últimas ediciones del Gran Premio de Austria, en 2002 y 2003.
‘Iceman’ Raikkonen también estuvo cerca en 2001, cuando fue cuarto compitiendo con un Sauber, en una carrera en la que Alonso no pudo terminar en su Minardi por un problema de embrague. El español tampoco logró concluir la carrera en 2003, ya en Renault, por problemas de motor.
Felipe Massa compitió en este circuito en 2002 con Sauber (retirado), mientras que Jenson Button fue quinto en 2000 (Williams), no pudo terminar en 2001 (Benetton Renault), séptimo en 2002 (Renault) y cuarto en 2003 (BAR Honda).
El circuito austríaco, que se estrenó como parte del campeonato de automovilismo en 1970 -el anterior Gran Premio de Austria, en 1964, se celebró en el aeródromo de Zeltweg, cercano al actual trazado-, ha formado parte de la competición entre 1970 y 1987; y entre 1997 y 2003, cuando se corrió la última carrera en el entonces denominado A1-Ring.
En 2003 la carrera fue para el alemán Michael Schumacher (Ferrari) en su penúltima temporada triunfal como piloto de la escudería italiana. El finlandés Kimi Raikkonen fue segundo (entonces en McLaren, hoy Ferrari) y el brasileño Rubens Barrichello (Ferrari) tercero.
El año anterior, en 2002, se vivió una extraña situación, en la que Barrichello, tras liderar toda la carrera, cedió el paso a Schumacher en las últimas vueltas para que el alemán ganara la carrera y sumara los puntos necesarios para mantenerse en el primer puesto del Mundial. Ambos pilotos levantaron el trofeo.
Precisamente en la semana en la que hemos conocido el despertar del coma del genial piloto alemán, ingresado en el hospital de Grenoble (Francia) desde el 29 diciembre tras un grave accidente de esquí, la Fórmula Uno vuelve a uno de esos lugares que conservan el registro de Schumacher imbatido: la mejor vuelta rápida (con un tiempo de 1:08.337).