El segmento de las furgonetas es el nuevo campo de batalla en Estados Unidos
El año pasado, en Estados Unidos se vendieron unas 45.000 unidades de furgonetas urbanas, cinco veces más que los vehículos vendidos en 2009 cuando Ford introdujo en Norteamérica la Transit Connect, fabricada en la planta que tiene en la localidad española de Valencia.
Y para 2017, los analistas prevén que las ventas de furgonetas se dispararán a 120.000 unidades, casi tres veces más que las del año pasado.
La multiplicación de las ventas de furgonetas en Norteamérica ha dejado claro a los fabricantes de automóviles que estos vehículos, hasta ahora sólo populares en Europa y Asia, cuentan con un sólido mercado en Estados Unidos donde están sustituyendo camionetas más costosas de operar y menos flexibles.
Pero hasta ahora, Ford con su familia Transit Connect ha dominado el mercado. De las 45.000 furgonetas vendidas en Estados Unidos el año pasado, 40.000 fueron productos de Ford.
En 2012, el presidente de Ford para el continente americano, Joe Hinrichs, aseguró que el fabricante había adaptado la europea Transit Connect a los gustos y necesidades de los norteamericanos como prueba de la seriedad de la apuesta de la marca del óvalo azul por el segmento.
‘Ford ha rediseñado la Transit Connect con los empresarios norteamericanos en mente. Este nuevo transporte de carga ofrece a los empresarios y propietarios de flotas una combinación única de eficiencia de consumo, capacidad de carga y maniobrabilidad’, dijo Hinrichs.
La clave del éxito de Transit Connect en Norteamérica se basa en que consume un 25 % menos combustible y es capaz de transportar más carga que los vehículos Serie E de Ford, hasta ahora los líderes del mercado de vehículos comerciales en Norteamérica y a los que está reemplazando la furgoneta.
Desde la llegada de Transit Connect a Norteamérica, se ha estado prestando atención al progreso del segmento y las proyecciones de ventas.
Por ejemplo, Ford estima que las ventas de furgonetas entre 2012 y 2017 aumentarán un 37 % en la región Asia-Pacífico, un 22 % en Norteamérica y un 17 % en Europa.
Pero si hasta ahora Ford ha tenido prácticamente el monopolio del segmento en Norteamérica, se está empezando a enfrentar a un mercado más competitivo.
La semana pasada, General Motors (GM) anunció que pondrá a la venta en octubre la primera furgoneta urbana de la historia de la marca Chevrolet, la City Express, con un precio base de 22.950 dólares directamente para competir con la familia Ford Transit.
La premura de GM por plantarle cara a Ford en el segmento es tal, que el vehículo que venderá Chevrolet es en realidad una versión de la furgoneta Nissan NV200 que el fabricante japonés produce en la factoría mexicana de Cuernavaca.
Aunque GM podía haber importado vehículos comerciales de su marca europea Opel, la opción de Nissan era la más rápida y apropiada para el mercado norteamericano.
La NV200 estaba destinada a convertirse en el taxi del futuro de Nueva York, y posiblemente otras grandes ciudades estadounidenses, tras ganar en 2011 un concurso.
Pero finalmente, decisiones políticas y judiciales pusieron fin al plan, lo que permitió que GM aprovechara la capacidad del vehículo de Nissan para cubrir el hueco en su gama de vehículos en Norteamérica.
Tanto el Nissan NV200 como el Chevrolet City Express utilizan un motor de 2 litros y cuatro cilindros que genera 131 caballos de potencia acoplado a una transmisión automática variable. Su capacidad de carga de es 122,7 pies cúbicos (3,48 metros cúbicos).
Además de con los vehículos de Nissan y Chevrolet, Ford Transit va a tener que competir a finales de este año con la opción del Grupo Chrysler en el segmento, el Ram ProMaster City.
Este modelo está basado en la furgoneta Doblo de Fiat, un vehículo del que la empresa italiana ha vendido más de 1,3 millones de unidades en todo el mundo.
El ProMaster City complementará al Ram ProMaster, otro vehículo comercial que el Grupo Chrysler ya vende en Norteamérica y que es una versión de la furgoneta de grandes dimensiones Fiat Ducato.