El 41 por ciento de los neumáticos fuera de uso se convierte en nuevos materiales
Este dato corresponde a la memoria de actividad de 2011 de TNU (Tratamiento Neumáticos Usados), el sistema integrado de gestión bajo el que se agrupan los principales importadores y distribuidores de neumáticos en España.
Este gestor recogió más de 7 millones de neumáticos usados en 2011 (51.800 toneladas), una cantidad que será similar en 2012 y que ha supuesto evitar la emisión de más de 400.000 toneladas de CO2 y un ahorro de más de 55 millones de litros de petróleo.
Si el 41,17 % es reciclado para obtener nuevas aplicaciones, el 46,22 % de los neumáticos recogidos se transforma en energía, un destino que limita el consumo de combustibles fósiles como una forma de lucha contra el cambio climático y el calentamiento global.
El 30 % del neumáticos está compuesto de media por caucho natural, es decir, biomasa, lo que hace que su utilización como combustible suponga, que el 30 % de las emisiones son neutras a efecto de calentamiento global y emisiones nocivas, ya que se libera un CO2 que ha sido atrapado por el árbol a lo largo de su vida.
El neumático utilizado en horno de cementera, explica TNU en la Memoria, tiene un poder calorífico similar al del carbón convencional, con la ventaja añadida de que sus emisiones de azufre son inferiores.
El porcentaje restante del neumático fuera de uso es sometido a un proceso de renovación bajo estrictos controles de calidad y de seguridad, cuya ventaja es que en el proceso de reciclado en esta aplicación se utilizan 5,5 litros de petróleo, en lugar de los 35 litros necesarios para la fabricación de un neumático nuevo para turismo (9 litros frente a 45 en neumáticos de 4×4 y 32 frente a 100 en neumáticos de camión).
El neumático renovado -en España sólo se renueva el 10,8 % de los neumáticos fuera de uso- produce un ahorro de 68 kilos de CO2 en el caso de los turismos, de 90 kilos en el de los vehículos 4×4 y de 170 kilos en el de los camiones, además de que llegar a ser un 60 % más económico que un neumáticos de nueva factura.
La conversión del neumático usado en otros materiales forma parte de un proceso de valorización con distintas aplicaciones, como la fabricación de pavimentos en continuo (9,52 %), empleados en campos de juego y atletismo; césped artificial (34,25 %) para campos de fútbol, golf o tenis, y losetas de seguridad (9,23 %) para parques de juegos, geriátricos o piscinas.
Un porcentaje pequeño de los neumáticos reciclados (1,67 %) se utiliza en asfaltos con base de goma, con grandes ventajas en adherencia (reduce la distancia de frenado) y en disminución de la sonoridad.
Otros usos varios consumen el 13,03 % de la valorización, con aplicaciones en mezclas de caucho, aislantes y bloques elásticos y pastillas de freno para camiones.
Del neumático fuera de uso resultan un alto porcentaje de metales (20,76 %), básicamente acero de gran calidad que es utilizado por la industria siderúrgica.