‘Se siente orgullo, porque es un número que así, a bote pronto, puede impresionar, pero realmente es sólo un número. Es un orgullo de haber podido llegar aquí, pero sobre todo de haber podido llegar con salud. Y de haber llegado con la ilusión de un niño de veinte años, de mi primera carrera con Arrows en el 99’, explicó, al ser preguntado por Efe en Monza, el piloto catalán.
‘Nada ha cambiado para mí. Lo único que ahora sé disfrutar más los momentos y estoy más tranquilo. Pero la ilusión que tenía en el 99 la tengo ahora. Por eso estoy contento de haber llegado a este número’, comentó a Efe De la Rosa, que después de correr para Arrows lo hizo para Jaguar, McLaren y Sauber antes de pasar, este año, a capitanear el HRT, la escudería española.
‘Obviamente sé más que en 1999. Pero sabré menos que lo que sepa si llego a 150’, bromeó De la Rosa.
‘Me considero que he aprendido un montón, porque he coincidido con gente muy brillante, porque en Fórmula Uno hay gente muy brillante que te hace crecer, que te hace coger experiencia. Y me considero muchísimo más completo que en el año 1999. Mucho mejor piloto, también’, manifestó.
‘La mejor carrera obviamente, hay que ir a la del mejor resultado, que sería la de Hungría 2006. Aunque creo que hay otras muy buenas que han pasado al olvido. Sin ir más lejos, este año, en China creo que hice una carrera muy regular, muy fuerte. Y luego he hecho otras carreras también bastante buenas’, opinó.
‘Pero Hungría destacaría por el resultado y por cómo fue. Luego también hay muchas malas. En Austria, en 2000, cuando iba tercero, con un Arrows, me tuve que retirar por un problema del sistema hidráulico. Eso da mucha rabia’, declaró.
‘Luego también en Hockenheim (Alemania) iba cuarto, salió un espectador, neutralizaron la carrera, salió el ‘safety car’, perdí mi distancia con el quinto; y al final de la carrera se puso a llover y quedé sexto, porque tuve una salida de pista. En una carrera en la que podíamos haber hecho un podio’, comentó hoy, jueves, en Monza, De la Rosa, que entre las personas que más admira destacó, entre otros a Martin Whitmarsh, jefe de equipo de McLaren, y a Paddy Lowe, director técnico de esa escudería.
‘Aprender de ellos, de los ingenieros, del deporte, de la organización. Para mí ha sido como un curso universitario, que he podido hacer sin que nadie se enterara, porque era piloto reserva (de McLaren). Creo que es lo más bonito que me ha pasado, aprender con ellos. Y aprender sin prisas’, indicó.
‘Aprender en la sombra, en el simulador. Y aprender sin prisas. Y yo cada día pensaba, ‘cada vez sé más” manifestó de la Rosa, que cuando se le preguntó si, a la inversa, también se topó con gente que le influyó de forma negativa y si uno de ellos fue el austriaco Niki Lauda, que fue jefe de equipo suyo en Jaguar y acabó dejándolo fuera, el barcelonés dijo: ‘Trabajar con tus héroes de juventud tiene sus inconvenientes, porque dejan de ser héroes’.
‘Yo lo que apreció mucho, sobre todo, cuanto mayor te haces, es la sinceridad. A mí en Jaguar lo que me desestabilizó es que Niki Lauda tuviera una agenda privada para colocar a otros pilotos en mi lugar sin decírmelo. Que lo haga no me importa. Pero tendría que habérmelo dicho, para saber a qué te atienes los siguientes meses’, declaró.
‘Pero cuando la decisión está tomada y todo el mundo lo sabe, menos tú; eso de un piloto o expiloto, yo no me lo esperaba. Ese fue quizá el momento más incómodo que he pasado en Fórmula Uno. Cuando hablo con Niki…, él se ha excusado y ha dicho públicamente que se equivocó y no le guardo rencor. Tenemos una relación correcta. Pero en ese momento, si no llega a ser por McLaren mi carrera se hubiese acabado’, declaró De la Rosa.
‘Siempre he conseguido salir trepando de alguna manera de las situaciones en las que me he visto’, recalcó de la Rosa, que también destacó entre sus actuaciones la de Bahrein 2005, donde marcó la vuelta rápida.
El barcelonés, que admitió que se llevaría una alegría si alguna de sus tres hijas -Georgina, Olivia y Luna- decidiese un día dedicarse al automovilismo -‘aunque las he llevado al kárting y, de momento, lo de la cuatro ruedas, parece que no’- y que entre las mejores carreras en las que ha participado -al margen de su propio resultado- destaco ‘la de Fernando (Alonso) en Valencia este año’, en la que el doble campeón mundial asturiano ganó después de salir el undécimo.
‘Hockenheim en 2000 también fue otro ‘carrerón’ brutal, con (el brasileño Rubens) Barrichello saliendo el 18 y ganando la carrera. Y luego está el adelantamiento de (el finlandés Mika) Hakkinen a (el alemán Michael) Schumacher en Spa. Es de las carreras para volver a ver’, indicó de la Rosa, que no sabe hasta cuándo seguirá.
‘El año que viene, seguro, porque tengo contrato con HRT. Luego ya veremos. Pero, en cualquiera de los casos, me gustaría seguir vinculado al motor’, explicó De la Rosa.