Deportivo asequible
Mazda inicia la comercialización de una versión de acceso del deportivo RX-8, cuyo precio –33.000 euros– le permite posicionarse de forma muy ventajosa en el mercado. Y es que con cuatro verdaderas plazas, cuatro puertas de original apertura freestyle y un efectivo motor rotativo, el modelo japonés cuenta con excelentes argumentos y combinados ahora con un precio muy interesante. Respecto al conocido RX-8 de 231 cv que salió a la venta en 2003, el nuevo modelo de 192 cv es casi 6.000 euros más barato.
El motor es básicamente el mismo rotativo Renesis de 2,6 litros, un fiable propulsor que cuenta con nada menos que cinco años de garantía sin límite de kilometraje. La cifra de potencia máxima es ahora mucho más conservadora, con 192 cv, pero el par motor es prácticamente idéntico -220 Nm a 5.000 rpm- por lo que se espera una respuesta a bajos y medios regímenes muy similar entre una y otra evolución. Sólo en altas revoluciones esta nueva versión cede ante el empuje del hermano mayor, pero aún así logra unas prestaciones muy buenas: 7,2 segundos de 0 a 100 km/h y 220 km/h de velocidad máxima. En cuanto a los consumos este motor consume algo menos, conformándose con 10,6 l/100 km. Otra de las diferencias entre ambas versiones es la caja de cambios, manual en ambos casos pero de seis velocidades en el de 231 cv y de cinco velocidades en este nuevo de 192 cv.
Y por lo que se refiere a exclusividad, nada cambia, ya que esta versión conserva todo el equipamiento del modelo ya conocido (climatizador, control de estabilidad DSC, control de tracción TSC, ocho airbags, equipo de sonido Bose, y llantas de aleación de 18 pulgadas con neumáticos 225/45 R18. Por tanto, la diferencia entre uno y otro está clara: algo menos de potencia y caja de cambios con una marcha menos por casi 6.000 euros. Ustedes deciden.