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¿DE VERDAD ES DIESEL?
Jaguar ha puesto a la venta su primer motor diesel aplicado a una berlina de lujo de tamaño medio y el resultado es realmente satisfactorio. El motor desarrollado por Ford Motor Company con la colaboración de PSA debuta bajo el capó del S Type y marca un nuevo hito en suavidad de funcionamiento. Tras la presentación en septiembre de 2003 del X Type 2.0D, que se ha convertido en pieza clave del notable crecimiento experimentado por la marca en el último año, el S Type 2.7D es la pieza que necesitaba Jaguar para seguir aumentando su participación en un mercado al que cada vez le gusta más la mecánica diesel.
Para llegar a 207 caballos no hay que soportar tirones ni patadas como sí sucede en los motores de la competencia alemana, aunque eso sí, sus rivales ofrecen más rendimiento máximo a costa de mayores niveles de ruido y vibraciones. La clave de esta suavidad hay que buscarla en primer lugar en la elección de una estructura biturbo, con un compresor por bancada que permite utilizar turbinas de geometría variable menos pesadas y por tanto más rápidas en las variaciones de régimen que los coches dotados con un solo turbocompresor. Por supuesto la tecnología empleada está a la última. Así por ejemplo el bloque está realizado en una aleación de hierro y grafito que posee mayor resistencia que los bloques de hierro habituales en los propulsores diesel y que permite reducir la cantidad de material y por tanto el tamaño y el peso. El resultado ha sido un motor que pesa solo 15 kilos más que el 3.0 V6 de gasolina, concretamente 202 kg. De la admisión se encargan inyectores con control piezoeléctrico alimentados por common rail de alta presión.
Pero también la puesta a punto de la electrónica tiene mucho que ver en la suave respuesta del motor. José Carmona, Consejero Delegado de Jaguar Hispania, nos contó que los técnicos de la marca habían realizado muchas pruebas en las que investigaron con diferentes niveles de potencia superiores algunos al finalmente elegido, pero la elección de la cifra final se debió a que ante todo querían lograr un motor que empujara como si de un atmosférico de gasolina se tratara… ¡incluso en el sonido parece de gasolina! Otra preocupación era evitar las humaredas negras al acelera a plena carga… algo que no resulta admisible para la refinada imagen de Jaguar.
El motor empuja linealmente y agradece rodar en torno a 3.000 revoluciones por minuto, unas 1.000 vueltas más alto que otros propulsores equivalentes. De hecho aunque el par máximo es de 435 Nm y se logra desde 1.900 rpm, pero el motor pide funcionar a un régimen mayor. La potencia máxima se logra a 4.000 rpm., al borde del corte de inyección, y seguramente de seguir estirando por encima de este régimen aumentaría el rendimiento sin problemas. En las unidades dotadas de cambio manual es fácil dejarse llevar por la agradable estirada y encontrar el corte cuando el motor parece estar en su mejor momento.
Hablando del nuevo cambio manual ZF de 6 velocidades exclusivo para el motor diesel creo que se trata de lo peor resulto del coche. Es impreciso, tiene recorridos largos y su accionamiento es algo incómodo porque el codo choca con la tapa del cajón central. El S Type es mejor coche con cambio automático, no en vano posee uno de los mejores del mercado. Es mucho más agradable e incluso eficaz que el manual en carreteras de cualquier condición. Eso sí, resulta 2.240 euros más barato con cambio tradicional, pero el aumento de precio no es tan elevado porcentualmente en un coche de esta categoría y merece completamente la pena.
Para quien la suavidad y la distinción tengan tanta importancia como el rendimiento, este Jaguar es una opción muy atractiva en la categoría de las berlinas premium diesel de seis cilindros, porque si comparamos los rendimientos máximos se encuentra a medio camino entre los BMW 525d / Mercedes 270CDI y los 530d / 320CDI. En precio está bien posicionado respecto a esta situación intermedia, al menos en el acabado inicial Classic (43.900 euros en abril de 2004), 5.500 euros más barato que los Executive y Sport, muy equipados, entre otras cosas con tapicería de piel de serie.
Carlos Lera, Autocity.
27 de Abril de 2004
27 de Abril de 2004
Novedades S-Type
Pero no solo se trataba de probar el nuevo motor diesel, aunque sin duda se tratara de la estrella de la convocatoria. También tuvimos oportunidad de comprobar las novedades de diseño introducidas en todo el modelo y la nueva caja de cambios de seis velocidades que ZF ha realizado para el nuevo motor.
Todos los S Type a partir de ahora reciben un cambio de imagen que afecta discretamente al frontal y los laterales, pero más claramente a la zaga. Se trata por cierto de la segunda operación de cirugía realizada al ya veterano modelo y si bien en la primera se tocaron más apartados de suspensiones y dirección en esta se ha incidido notablemente en el apartado estético. Sin otro S Type anterior al lado no resulta fácil advertir cómo ha variado la calandra, ahora más ancha; las ópticas delanteras, más verticales; o el parachoques, menos anguloso. Además el capó está realizado ahora en liviano aluminio.
Lateralmente se advierten mejor los nuevos pilotos traseros y el perfil inferior de la carrocería, más recto y ancho que antes. Por detrás todo es nuevo, desde los pilotos hasta la línea del maletero, más alta y recta, pasando por el listón horizontal en el que aparece la marca del coche y que será un rasgo común a todos los modelos de la firma de Coventry a partir de ahora.
Algunos detalles interiores han cambiado también y por primera vez se ofrecen en el acabado Sport inserciones de aluminio para el salpicadero y los listones de las puertas que realmente le sientan muy bien. Sin restarle elegancia para mi gusto le da un exquisito toque deportivo… algo así como sucedía hace unos años en los interiores de Bentley respecto a Rolls-Royce. Las llantas también han crecido de tamaño, siendo ahora de 17 y 18 pulgadas de serie según el acabado.