Inicio
EL PODER DEL TURBO
La nueva gama 9-3 de Saab está ya en los concesionarios, la cual ha recibido cambios profundos tanto en la carrocería como en la parte mecánica. Sin embargo, el modelo más interesante, el Aero, todavía tardará unos meses en llegar, pues su comercialización se espera para enero de 2002. Se trata de una berlina deportiva de altas prestaciones que tiene como mejor argumento la energía que le aportarta la sobrealimentación, técnica en la que los suecos son unos maestros.
El Saab 9-3 Aero, modelo que todavía no tiene fijado su precio, se enfrentará en el mercado a vehículos como el Audi A4 3.0, el BMW 330i o el Volvo S60 2.4 T entre otros, y compagina a la perfección las sugerentes sensaciones que proporcionan los 210 cv con el confort y versatilidad que le da su moderado planteamiento de suspensiones y su espaciosa carrocería. Si lo comparamos con el anterior 9-3 Aero, la ganacia ha sido muy significativa, sobre todo en capacidad de tracción y en diseño.
Enrique Marco, Autocity.
10 de octubre de 2002.
CONDUCCION
La conducción del 9-3 Aero es todo un placer. Quizá haya berlinas más potentes, también mucho más radicales de planteamiento; pero la efectividad que ha alcanzado su chasis, la suavidad de manejo de todos los mandos y el enorme empuje de su dos litros turboalimentado, resultan en conjunto de lo más satisfactorio. La guinda la pone el sonido del turbo, el cual se percibe con un excitante silbido al acelerar y también al ‘cortar’ para pasar a una marcha más larga, momento en el que ‘coge respiración’.
Comparado con el modelo anterior, en potencia apenas ha ganado, por lo que no le supera en prestaciones (7,5 segundos para pasar de 0 a 100 km/h y 235 km/h de velocidad máxima), pero en agrado de conducción y seguridad la mejoría es notable. Digamos que en éste ya no aprecia esa ligereza del eje delantero que le hacía comportarse de forma algo nerviosa. Así las cosas, en el nuevo Aero se une una ejemplar respuesta del motor a un comportamiento dinámico notable. No se han buscado unas sensaciones ‘racing’, pues los tarados de suspensión le delatan, pero tampoco llega a resultar excesivamente blando.
En definitiva, el Saab 9-3 Aero es la alternativa al famoso trío de berlinas alemanas (A4, 330 y Clase C). Resulta agradable de conducir, potente y poco bebedor (8,5 l/100 km como media). Como opción, se puede sustituir el cambio manual de seis velocidades que viene de serie por uno automático con mando secuencial y accionamiento desde el volante, aunque para efectividad preferimos el manual. En todo lo demás: frenos, dirección, sonoridad… la nota conseguida por el nuevo Aero es realmente elevada.
DISEÑO Y EQUIPO
Exteriormente el nuevo 9-3 apenas se parece a su predecesor. De hecho, tiene más similitudes con el 9-5 que con el modelo al que sustituye, algo lógico ya que el portón trasero del veterano 9-3 se ha cambiado por un maletero convencional, mucho más elegante y que le aporta mayor categoría. Curiosamente, la longitud total del vehículo no ha aumentado (4,63 metros), aunque sí lo ha hecho la altura, la anchura e incluso la distancia entre ejes, por lo que la habitabilidad se ha visto ligeramente incrementada. El volumen del maletero es de 425 litros.
Estéticamente podemos decir que estamos ante un modelo elegante, actual y deportivo. Su frontal es muy aerodinámico, así como el parabrisas y las ventanillas de acusada curvatura. Son características con las que Saab quiere ganarase el nombre de ‘Berlina Deportiva’ con el que propiamente se ha bautizado, calificativo que una vez visto y probado pensamos que se merece. En el interior las cosas también han cambiado sustancialmente, aunque se conserva el estilo del salpicadero característico de estilo ‘de avión’, eso sí, mucho más ergonómico que el anterior, beneficiando de esta forma la postura al volante. Además de unos materiales que parecen de buena calidad, destaca la nueva pantalla sobre el salpicadero, que agrupa diversas informaciones y contribuye a dar un toque de lujo y equipamiento.
Por lo que se refiere al acabado específico del Aero, éste resulta deportivo a la vez que discreto. Se distingue del resto de la gama por un spoiler delantero más bajo, un pequeño alerón en el maletero, llantas de aleación de 17 pulgadas de diseño específico, salida de escape ovalada y cromada y faros de bi-xenón. Además, debido a la suspensión rebajada, la silueta es todavía más deportiva. Y respecto al equipamiento de confort y seguridad, falta por concretar todos los elementos que llevará el Aero, pero no se prescindirán de los habituales hoy día en berlinas tope de gama, como los seis airbags, ABS, climatizador, controles de tracción y de estabilidad, etc. Su precio todavía se desconoce.