Saab 9-3 2.0t

CON LAS MIRAS MUY ALTAS

El fabricante sueco Saab iniciará durante el próximo mes de septiembre la comercialización del nuevo 9-3, una berlina deportiva de cuatro puertas que poco o nada tiene que ver con el modelo al que sustituye. Con este automóvil Saab pretende luchar de tú a tú en el segmento de ‘premiun’, donde reinan el Audi A4 o el BMW Serie 3. Argumentos para estar a su altura, y en algunos apartados por encima, no le faltan, razón por la que los directivos de Saab esperan aumentar sensiblemente las ventas en un año difícil a costa de ganar cuota de mercado.

En principio la gama 9-3 dispondrá únicamente de la carrocería sedán, con dos motores de gasolina y uno turbodiesel. Más adelante, en enero de 2003, llegará la versión más deportiva y potente, el Aero, y a lo largo del próximo año irán apareciendo los cabrio y el Station Wagon, para terminar en 2004 con el estreno de un 4×4 al estilo que marcan las modas. Durante la presentación internacional a la prensa tuvimos la oportunidad de conducir el 9-3 2.0t de 175 cv, modelo que nos dejó un grato recuerdo, y del que ya se admiten pedidos a un precio de 28.900 euros.

Enrique Marco, Autocity

18 de julio de 2002

DISEÑO Y EQUIPAMIENTO

Exteriormente el nuevo 9-3 apenas se parece a su predecesor. De hecho, tiene más similitudes con el 9-5 que con el modelo al que sustituye, algo lógico ya que el portón trasero del veterano 9-3 se ha cambiado por un maletero convencional, mucho más elegante y que le aporta mayor categoría. Curiosamente, la longitud total del vehículo no ha aumentado (4,63 metros), aunque sí lo ha hecho la altura, la anchura e incluso la distancia entre ejes, por lo que la habitabilidad se ha visto ligeramente incrementada. En este aspecto, en el del espacio, el 9-3 se encuentra en el mismo nivel que sus competidores más directos (A4, Serie 3, S60…), pero ya sabemos que los ‘generalistas’ de este segmento (Ford Mondeo, Citroen C5, Opel Vectra…) gozan de una capacidad mayor.

Estéticamente podemos decir que estamos ante un modelo elegante, actual y deportivo. Su frontal es muy aerodinámico, así como el parabrisas y las ventanillas de acusada curvatura. Son características con las que Saab quiere ganarase el nombre de ‘Berlina Deportiva’ con el que propiamente se ha bautizado, calificativo que una vez visto y probado pensamos que se merece. En el interior las cosas también han cambiado sustancialmente, aunque se conserva el estilo del salpicadero característico de estilo ‘de avión’, eso sí, mucho más ergonómico que el anterior, beneficiando de esta forma la postura al volante. Además de unos materiales que parecen de buena calidad, destaca la nueva pantalla sobre el salpicadero, que agrupa diversas informaciones y contribuye a dar un toque de lujo y equipamiento. Por lo que se refiere a niveles de acabados, se continúa con las denominaciones actuales: Linear (el más básico), Arc (el elegante) y Vector (el deportivo). También está el Aero, pero esto más que un nivel de equipamiento es otro coche, pues sólo se asocia al modelo de 210 cv que llegará en enero del próximo año.

CONDUCCION

Una vez acomodados en el puesto de conducción del nuevo Saab observamos como se ha mejorado mucho la postura al volante, gracias en parte al rediseño del salpicadero. Sin embargo, el diámetro del volante nos parece excesivo, desentonando con el tono deportivo que se le quiere dar a la berlina. Aún así, éste es regulable en altura y profundidad, lo que facilita la antes mencionada comodidad al volante. La típica puesta en marcha de Saab (con la llave junto al freno de mano y debiendo pisar el pedal de embrague) nos conduce un ‘mundo de suavidad y dulzura‘. La insonorización del habitáculo es sobresaliente, el manejo de los mandos exquisito y la respuesta mecánica totalmente progresiva.

La vasta experiencia que los suecos tienen en el desarrollo de turbocompresores hará que la gran mayoría de los que tengan formada una opinión negativa sobre el uso de la sobrealimentación, cambien radicalmente su postura, pues con ejemplos como éste se comprueba como un motor turbo pude ser muy enérgico pero a la vez de uso suave, fácil y seguro. Las cifras hablan por sí solas, y al excelente nivel prestacional conseguido se le unen unos consumos de lo más razonable y un agrado de conducción sobresaliente. Y en cuanto a su comportamiento dinámico se refiere, el trabajo realizado en el nuevo chasis ha sentado muy bien al 9-3. Con un tarado de suspensiones no muy enérgico para no restar comodidad, se ha logrado un grado de seguridad y confianza al volante muy elevado, lo que indica el buen hacer de sus ingenieros. Frenos y cambio de marchas cumplen perfectamente su cometido. Quizá las relaciones de la caja de cambios sean un poco largas, además de que pesa una tonelada y media, pero por otra parte contribuyen a disminuir los consumos. Por último, la dirección, que en al anterior modelo era muy sensible, se ha corregido ganando en precisión, aunque para ser una berlina deportiva aún podía haber sido algo más directa y menos suave.

RESTO DE GAMA

La nueva gama del Saab 9-3, al que sus creadores llaman ‘Sport Sedan’, estará compuesta por tres motores de gasolina y uno turbodiesel. Junto al protagonista de nuestra prueba, se sitúa, un escalón por debajo, el 1.8t de 150 cv, denominación bastante engañosa ya que la cilindrada de éste (2 litros) es idéntica a la de sus hermanos mayores. El objeto de llamarlo así es el de diferencialo resto de la gama, que comparten mecánica y cuya diferencia de potencia se basa, principalmente, en la presión de soplado del turbo.

Ya el modelo de acceso (26.300 euros) logra unas prestaciones satisfactorias, pues supera ampliamente los 200 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en menos de 10 segundos. El escalón alto de la gama, el Aero, que se pondrá a la venta en enero y todavía no tiene fijados los precios, cuenta con un turbocompresor diferente al resto y con mayor presión, que eleva la potencia hasta los 210 cv. Con semejante potencial las prestaciones son propias de un depotivo, pudiendo alcanzar 235 km/h y acelerar de 0 a 100 km/h en 7,5 segundos. Por si fuera poco, los consumos son muy contenidos, conformándose con 8,5 l/100 km como media. El motor turbodiesel es un 2.2 con culata de aluminio y 16 válvulas que desarrolla 125 cv, mecánica idéntica a la del anterior 9-3 y a la del Vectra 2.2 DTI. En el 9.3 se denomina TiD y consume 6,6 l/100 km como media, le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 11 segundos y llegar a los 200 km/h. Su precio es de 26.300 euros.

Como opción, todos los modelos podrán llevar caja de cambios automática. Por último, en cuanto a acabados se refiere, el estilo ‘Linear’ es el más básico y económico. El acabado ‘Arc’ añade llantas de aleación de 16 pulgadas e interior en cuero con acabados en madera de álamo; mientras que el estilo ‘Vector’ incorpora llantas de aleación de 17 pulgadas y tapicería deportiva en combinación de cuero y tela, con acabados en cromado mate. Estos dos últimos niveles de acabados acarrean un incremento de precio de unos 3.000 euros.

GALERIA FOTOGRAFICA

CARACTERISTICAS TECNICAS Longitud 4,635 mts Anchura 1,762 mts Altura 1,466 mts Distancia entre ejes 2,675 mts Peso 1.440 kgs Posición Motor Delantero Alimentación Inyección y turbo Cilindros 4 en línea Cilindrada 1.998 c.c Potencia 175 cv a 5.500 rpm Par máximo 265 Nm a 2.500 rpm Velocidad máxima 225 km/h Aceleración 0-100 8’5 seg Dirección Asistida Diámetro de giro 10,8 mts Frenos Discos ventilados (DEL.)
Discos (TRAS.) Suspensión delantera McPherson Suspensión trasera Independiente con cuatro brazos Neumáticos n.d. Consumo mixto 8’5 l. Capacidad depósito 62 l. Capacidad maletero 425 l. Precio 28.900 euros