Inicio
LA DOSIS DEL EXITO
Coche urbano, original en sus formas y muyaccesible por precio y equipamiento para una clientela juvenil, todoello bien mezclado constituye una oposición segura hacia el éxito.
El mensaje lo lleva aplicando casi al pié de la letra elfabricante coreano Hyundai con su modelo Atos, en la doble vertientede la versión estándar, y en la más estilizada, juvenil ycurvilínea, Prime.
El mercado lo ha aceptado tal cual es y este Atos es hoy uno delos reyes indiscutibles de las atestadas calles de Madrid, en lasque se mueve con la agilidad y alegría que se le exige a cualquiercoche pequeño. No es de extrañar que se le mire con cierta envidia,incluso desde coches de más empaque, cuando gana terreno en losatascos o aborda con decisión la siempre difícil asignatura deaparcar, dadas sus reducidas dimensiones.
Angel Alonso
EFE, 2 de enero de 2002
Detalles
DETALLES
El modelo probado, la versión Prime, recoge las mejoras externas,dinámicas y de equipamiento introducidas en la gama 2001. Por fuera,se aplica el ya poco original recurso innovador de una parrillamayor y la nueva conformación de los faros. De cara al confort, seajustan las tapicerías a colores y texturas más en consonancia conlos gustos europeos y se le otorga un aire deportivo con los relojesde esfera blanca.
La seguridad ha ganado enteros con un nuevo sistema de frenado y,sobre todo, por el refuerzo que ha supuesto la introducción de losdiscos autoventilados con pinzas flotantes en las ruedas delanterasy los tambores autoajustables en las traseras. Las mejoras en esteapartado se refuerzan con el sistema ABS de última generación comoopción.
Retoques muy aparentes para un coche que desde la humildad de susprestaciones cumple como muy pocos la ingrata tarea de circularcomo, casi siempre, contenido, en el medio urbano.
CONDUCCION
La carretera, desde luego, no es su medio. Se desenvuelve bien entrayectos de radio corto, pero en el viaje largo deja entrever suscarencias. Entre ellas no está la incomodidad por la falta deespacio. Cuatro personas viajan más que aceptablemente en suinterior, con un volumen que sorprende para lo que son sus medidasexternas, pero el escaso recorrido de las suspensiones le deja enmal lugar al afrontar cualquier bache o irregularidad del terreno.
La estructura del coche, semejante a la de un monovolumen por sualtura, pero sin acompañarle en la proporción la anchura, nofacilita la estabilidad en ruta y hasta se puede complicar launiformidad de su trayectoria con vientos fuertes de costado.
El motor en esta nueva gama es el mismo con que se estrenó elmodelo en el mercado español, con la modificación de un añadido decuatro caballos en su potencia.
De la humildad de sus números, 1.0 litros y 59 CV, no seentresacan débiles prestaciones. Es un motor ciertamente ágil yalegre, ideal para moverse en desarrollos medios, con buenasrecuperaciones y una sorprendente capacidad para mantenerse en muybuen tono en registros de velocidad próximos al máximo legal, aún acosta de una ganancia indeseable de decibelios.
Las correcciones introducidas en la transmisión le han facultadopara estar más presto en las salidas y facilitar los escalonamientosdesde los regímenes más bajos, con algo más de recorrido, perotambién es cierto que es tardo en la recuperaciones cuando lasrevoluciones caen en exceso. Uso obligatorio de palanca para reducires el paso necesario.
El consumo está en la línea de la modestia de sus números.Durante la prueba, en un recorrido mayoritario por ciudad rebasó muyligeramente los ocho litros, muy en la línea de las homologacionesdel fabricante.
El Hyundai Atos, en esta nueva gama 2001, refuerza suposicionamiento como una de las opciones más interesantes de cocheurbano del mercado español. Es su propósito y no ha ofrecido niprometido nada más.