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Por Fernando A. Marqués
Madrid, 10 oct (EFE).- En la tarea de probar automóviles no es difícil conducir vehículos que acrediten con cifras de potencia que dan escalofríos, pero muy pocas veces se topa con un deportivo que responda fielmente al concepto, que irradie los encantos de un coche de carreras sin serlo, de calle, al menos para los amantes de las cuatro ruedas.
Diseño
El S2000 ha sido desarrollado por Honda para cumplir su 50 aniversario y lo ha hecho rememorando el espíritu deportivo del S800 lanzado el mercado en 1965. El diseñador, Shigeru Uehara, es el mismo del NSX, considerado el ferrari japonés.
Interior
El interior ofrece lo justo para dos personas, que irán sentadas en dos butacas que envuelven a los ocupantes para proporcionar una buena sujeción en un coche en el que las inercias pueden ser, depende ya del conductor, tremendas.
Motor
El motor, un 2.0, es capaz de ofrecer un rendimiento de 120 caballos por litro, una capacidad reservada al mundo de la competición, aunque con la elasticidad de un motor para uso diario, gracias a su sistema de distribución variable, que permite una conducción suave en la parte baja del cuentarrevoluciones o una radical en el entorno de las 9.000 vueltas.
Comportamiento
El coche obedece de inmediato cualquier solicitud y mostrando un conjunto de reacciones que proporcionan esa sensación de seguridad que permite una conducción relajada aún a pesar de un negociado extremo de las curvas. En los cambios bruscos de apoyo (zig-zag), la parte trasera tratará de adelantarnos, una situación que se corrige con mucha facilidad.
Características
Técnicas
Competidores