Museo de Málaga
REPORTAJE
Se abrió al público en septiembre del año pasado, y para muchos especialistas en coches clásicos el Museo del Automóvil de Málaga se ha convertido por derecho propio en la mejor exposición de vehículos de época de España. Cierto es que existen algunas otras colecciones abiertas al público de gran interés, como la que hasta ahora era la referencia (el Museo de la Historia de la Automoción de Salamanca), pero la reciente muestra automovilística de la ciudad andaluza merece un sobresaliente. Además, la guinda al pastel la pone el edificio en el que está ubicado, una antigua fábrica tabacalera, cuyo pabellón destinado a tal uso se encuentra restaurado a la perfección.
El alma máter de este museo es el coleccionista portugués José Magalhaes, quien ha llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento de Málaga para ceder sus joyas. Es decir, que todos los coches ahí expuestos son suyos. Pero la grandeza de este museo radica tanto en la cantidad (85 coches) y calidad de los ejemplares (perfectamente conservados y/o restaurados), como en la puesta en escena, ya que tanto la decoración de los espacios temáticos como la arquitectura del edificio forman un cóctel tremendamente atractivo.Destacan algunos de los espacios temáticos, como los denominados Art Decó y la Dolce Vita
La muestra se divide en 10 áreas que abarcan las épocas de los automóviles o sus estilos. Todas ellas están identificadas por su nombre y contienen una breve explicación, además de ser fácilmente identificables por la denominación elegida: Belle Epoque, Años 20, Art Decó, la Dolce Vita, etc. Como complemento y curiosidad también hay una representación de vehículos de energías alternativas, así como de versiones preparadas. Más raro todavía es ver la sección de sombreros y vestidos de época, una extravagancia del propietario de las obras que ha querido incluir en este museo. Pero lo cierto es que aunque resulte extraño todo está muy bien conjugado.
Centrándonos en los coches que podemos ver, la ruta por el museo se inicia con los vehículos de principios del siglo pasado, con ejemplares de las marcas De Dion Bouton, Charron o Richmond entre otras. En el siguiente espacio, dedicado a los locos años 20, destaca un Hispano Suiza Torpedo Barcelona Tourer, todo un ejemplo del máximo lujo de la época. Pero las joyas más valiosas las encontramos en la que en este museo denominan la edad de oro del automóvil, la de los años 30, también bautizada como Art Decó. Puede que el más cotizado sea el Mercedes 540K de 1937 (cerca del millón de euros en las subastas), una de las referencias anteriores a la Segunda Guerra Mundial. Se construyeron menos de 500 ejemplares a medida de cliente, mientras que su mecánica era de 8 cilindros, 5,4 litros y llevaba compresor. Sin duda, en aquellos tiempos era el preferido por los máximos mandatarios del ejército nazi.
El Mercedes 540K de 1937 es una de las mejores piezas del museo
Pero junto al 540K relucen igualmente sendos ejemplares de Bugatti e Hispano Suiza, un T-57 Galibier del 36 y un majestuoso K6 del que la casa mitad española mitad suiza apenas fabricó 202 unidades. Aunque quizá uno de los más desconocidos sea el magnífico ejemplar del Lancia Astura, un coche ya de por sí exclusivo con su motor V8, pero que esta unidad en concreto resulta única por su carrocería y accesorios (incluido un tocador con frascos de perfume, ideado para la mujer de la alta sociedad, según dice el respectivo cartel informativo que acompaña a todas las piezas).
De mediados del siglo XX el Museo de Málaga posee una amplia selección de modelos americanos, entre los que no faltan mitos como el Cadillac El Dorado o el Ford Thunderbird; pero tampoco se olvidan algunos de los deportivos italianos, británicos o alemanes más prestigiosos: Maserati A6 y Ferrari 250 GT, Jaguar XK y Aston Martin DB2, o Mercedes 300SL Alas de Gaviota y Porsche 356. Finalmente, en la última estancia de la exposición encontramos algunas curiosidades tuneadas que si bien no serán del agrado de los más puristas, bien es cierto que ponen una nota de color y originalidad.
En definitiva, una amplia y selecta muestra de gran valor tanto histórico como económico que otorga a Málaga el honor de poseer el mejor museo del automóvil de España. Las visitas se pueden realizar de martes a domingos de 10.00 a 19.00 horas y el coste de la entrada es de 6 euros, un precio justo por contemplar los 85 vehículos a los que se suman algunos otros artículos en los 6.000 metros cuadros de exposición.