Cómo organizar tus maletas en el coche

En los puentes, festivos o fines de semana es habitual que por las carreteras circulen coches con exceso de equipaje, una circunstancia que en muchas ocasiones compromete la conducción y la seguridad. Simplemente, por una consideración fundamental a la que se llega sin ser Licenciado en Física: la carga varía el reparto de pesos del vehículo y por lo tanto afecta al centro de gravedad.

Visto esto, parece razonable pensar que un peso mayor de lo normal influye en la estabilidad del coche, porque suspensiones, ESP y dirección no trabajan de la misma manera, apareciendo las habituales inercias y balanceos. De la misma manera, la distancia de frenado es mayor, por lo que anticiparnos a cualquier situación es bienvenido siempre que carguemos más de la cuenta el coche.

En un vehículo con un peso en vacío de una tonelada y media, su Masa Máxima Autorizada (MMA) suele incrementarse un 25%, con lo que cargados hasta los topes legales, ese mismo coche pesaría dos toneladas. Es evidente, pues, que esa notable variación en el peso influirá también en las prestaciones y consumos del vehículo, que correrá menos y acelerará más lento (el velocímetro tardará más en llegar a su tope, si es que lo logra) y el consumo medio se disparará, más aún si llevamos maletas u otros objetos en bacas sobre el techo que lastran la aerodinámica del vehículo (más superficie “choca” contra el aire, más combustible se necesita para avanzar a la misma velocidad).

A continuación dividimos los consejos útiles relacionados con el exceso de equipaje en dos tipos: colocación de objetos (antes de arrancar) y dinámicas (ya en marcha). Entre las primeras, es muy importante que en el maletero los objetos más pesados vayan lo más bajo y cerca posible de los asientos traseros, y partir de ahí coloquemos el resto del equipaje, con especial atención a los “objetos rodantes” que en una curva pueden deslizarse por el cofre de carga, de ahí que las maletas con ruedas deben colocarse hacia arriba (que las ruedas no apoyen en el piso de carga). Los pequeños objetos, o aquellos con formas irregulares, sería muy recomendable que fueran fijados con redes, cintas tensoras, raíles, ganchos u otros equipamientos que muchos SUV o 4×4 incluyen de serie. Según un estudio del RACE, en un turismo ocupado por cinco ocupantes y con el maletero lleno y cargado hasta el techo, el consumo puede aumentar hasta en un 25%

En caso de que el espacio de carga no sea suficiente (aquí tienes un listado de los coches con más maletero del mercado), las maletas también pueden ir en el habitáculo, en el suelo tras los respaldos delanteros o en los propios asientos traseros con el cinturón abrochado, sino hay ocupantes. Es muy importante el uso del cinturón para estos fines, porque en caso de accidente a una “velocidad urbana” de 50 km/h, el peso del objeto se multiplica por 50 y las consecuencias pueden ser fatales, de ahí lo importante que es no colocar objetos de más de 25 kg detrás de alguno de los ocupantes, en la bandeja del maletero por ejemplo, además de poder dificultar la visión del conductor en caso de ser muy voluminosos.Dentro del habitáculo, un objeto mal colocado puede ser fatal: a 50 km/h su peso se multiplica por 50

Por otro lado, según la ley, los animales pueden viajar en el coche siempre que no interfieran en la seguridad: deben ir separados del conductor, bien en los asientos traseros con rejas extraíbles o con una específica correa-cinturón, o en el maletero dentro de jaulas o canastas. Si aprovechando todo este espacio interior todavía necesitas más, ahí tienes los portaequipajes (eso sí, sabiendo que la aerodinámica quedará perjudicada y el consumo medio puede aumentar hasta en un 15%, según el RACE). En tal caso, se puede optar por la clásica baca, con un peso extra de 75 kg, que debería ir colocada lo más cerca posible del eje delantero y con los objetos bien fijados para garantizar que el equipaje no se quede por el camino (los cofres, muy implantados en los países del centro y norte de Europa, son una genial solución).

YA EN MARCHA
En cuanto a los conejos dinámicos, es importante tener en cuenta que un coche tan cargado no se comportará de la misma manera que sin dicho equipaje. Por eso nuestra manera de conducir se tiene que aproximar a cuando adaptamos la conducción a las condiciones de la calzada por mala climatología, es decir, no hay que apurar tanto la frenada, se necesita más tiempo y espacio para adelantar a otro vehículo, o las curvas deben trazarse más suavemente por la tendencia del coche a irse hacia fuera (subvirar). Como últimas recomendaciones, aumentar ligeramente entre 0,2 y 0,3 bares la presión de nuestros neumáticos, sobre todo en el eje trasero, y apoyarse en el freno motor, esto es, reducir de marchas para ir reteniendo el coche, por ejemplo en la bajada de un puerto de montaña.