Para Audi estar “A la vanguardia de la técnica” no es solo una afirmación, es también un compromiso por encontrar nuevas propuestas y soluciones. La mejor prueba de ello es la historia del Audi A8, que en 1994 fue el primer vehículo con una carrocería fabricada completamente con aluminio. Pocos años después, su sucesor fue uno de los vehículos diésel V6 más eficientes de su categoría.