‘Ha sido muy agradable volver al circuito de Shanghái, donde he vivido momentos realmente buenos de mi carrera’, comentó Rosberg, de 27 años, que el año pasado firmó ‘pole’ y victoria -las únicas de su carrera en F1- en China.
‘Me sentí bien en el coche. Ha sido un día realmente productivo para nosotros, porque hemos aprendido muchas cosas’, manifestó el hijo del mítico Keke, que ganó el Mundial de 1982 para Finlandia tras haber obtenido una sola victoria ese año.
‘Vamos bien a una vuelta, pero aún tenemos que mejorar en las tandas largas. La degradación de los neumáticos fue especialmente alta con el compuesto blando. Por eso tenemos que analizar esto y ver qué es lo mejor para la carrera’, opinó Rosberg.