‘Villeneuve tenía un ímpetu extraordinario, y quizás eso le hizo perder algunos puntos y tener mejores resultados a final de temporada. Ahora Alonso, sobre todo en carrera, es el piloto más fuerte en el mundo’, señaló Montezemolo en la pista del equipo en Fiorano al comparar el pasado y el presente de Ferrari.
El presidente de Ferrari añadió que ‘Gilles daba al público lo que éste le pedía. Y no corría por el campeonato, sino por ganar carreras’. ‘Por eso quizás estaba menos unido a él que a otros de mis pilotos, como (el austríaco Niki) Lauda, (el suizo Clay) Regazzoni o (el argentino Carlos) Reutemann’, precisó.
‘Recuerdo cuando Enzo Ferrari me dijo que se había fijado en un joven de gran temperamento y talento que corría en Canadá. Tenía un precontrato con McLaren, pero ‘il Drake’ (sobrenombre de Enzo Ferrari) quería aire fresco en la escudería. Era un piloto y un hombre extraordinario’, afirmó.
Montezemolo considera que en la actual Fórmula Uno ‘un piloto indisciplinado no tiene cabida en Ferrari’.
El hijo de Gilles Villeneuve, Jacques, que fue campeón del mundo de Fórmula Uno en 1997, rindió hoy homenaje a su padre, fallecido en accidente hace justo treinta años, pilotando en el circuito italiano de Fiorano el Ferrari 312 T4 que éste utilizó en 1979.
Al acto de homenaje, que tuvo lugar hoy en Fiorano, asistieron el presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo y el vicepresidente de la escudería italiana, Piero Ferrari; así como la viuda de Gilles, Johanna, y su hija Melanie, y los dos pilotos de la misma, el doble campeón mundial español Fernando Alonso y el brasileño Felipe Massa.
Jacques Villeneuve compartió equipo durante tres Grandes Premios -los tres últimos de 2004- con el doble campeón mundial asturiano, con el que coincidió en Renault.