‘Estamos delante de una nueva era en el Dakar. Va a ser la carrera más abierta de la historia’, dijo en una rueda de prensa en Rosario el piloto de KTM, que se perdió por lesión el último rally.
KTM, vencedora en las doce últimas ediciones de la carrera, puede tener este año una mayor oposición de marcas como Honda y Yamaha, que han preparado motos muy competitivas y cuentan con pilotos de renombre.
‘Es un momento con numerosas fábricas involucradas con proyectos realmente sólidos y fuertes y buenos pilotos. En la ultima década estábamos acostumbrados a ver una sola marca muy fuerte con equipo consistente, y ahora ha cambiado completamente’, reconoció Coma.
El francés Cyril Despres, ganador de los dos últimos Dakar y cinco en total, dejó KTM para incorporarse a Yamaha, donde está apoyado por su compatriota Olivier Pain.
El equipo oficial de Honda, en tanto, se ha reforzado con la llegada del español Joan Barreda y el portugués Paulo Gonçalves, ambos provenientes de Husqvarna, este último vigente campeón del mundial de rallys.
Coma conoce bien el estilo de Despres, el rival a batir, aunque este año ninguno de ellos sabe el potencial de la moto de su contrincante.
‘Nos conocemos de hace muchos años y sabemos cómo actúa cada uno en cada situación, pero el panorama ha cambiado porque ambos conocíamos de qué herramienta disponía cada uno, pero ahora yo no sé exactamente el potencial de su moto y él no sabe el de la mía’, comentó el piloto catalán.
‘Es un factor más que seguro va a influenciar la táctica y cómo administrar la carrera’, añadió Coma, quien reconoció que con la partida de Despres el ambiente en el equipo oficial de KTM se ha relajado un poco.
‘La relación con Cyril no ha sido fácil. Somos dos pilotos ganadores y eso hace que a veces haya fricción. El equipo ha ganado en la parte humana y en comicidad para trabajar y espero que eso también nos ayude para optar al triunfo’, dijo.
Sobre el trazado de este año, que además de Argentina incluye a Chile y a Bolivia, este último por primera vez, el catalán aseguró que el Dakar ‘ha dado un giro a sus inicios’ con un recorrido a priori más duro y con dos etapas maratón, en las que los pilotos no cuentan con asistencia mecánica.
Coma consideró que los dos últimos rallys se habían convertido en pruebas excesivamente rápidas en las que había pocas oportunidades para rehacerse de los errores, algo que podría cambiar este año.
‘Ahora nos enfrentamos a una carrera mucho más compleja de gestionar. A parte de los buenos pilotos, la carrera lleva a que puedan pasar cosas con las dos etapas maratón’, señaló Coma.
El principal interrogante es Bolivia, donde las motos y los quads circularán en la séptima etapa por la región de Potosí hasta llegar al salar de Uyuni, a casi 4.000 metros de altitud.
‘Bolivia es nuevo, no tenemos experiencia allí y el tema de la altitud lo tenemos bien preparado pero es una incógnita cómo responde el cuerpo’, dijo.
Coma se mostró satisfecho con el rendimiento de su nueva KTM, confeccionada exclusivamente para el Dakar, una moto más ligera y cuya principal novedad es la incorporación del sistema de inyección de combustible.
‘Es un avance tecnológico muy bueno que sobretodo en las etapas de altura ayudará a que el motor rinda de una manera más efectiva’, comentó.