El cambio en el coche de Massa le hizo perder cinco puestos en la parrilla, de forma que Alonso pasó del octavo al séptimo lugar. En la salida avanzó hasta el cuarto puesto y terminó la carrera tercero, por detrás del británico Lewis Hamilton y del líder del mundial, el alemán Sebastian Vettel.
Domenicali no tiene ninguna duda de que la decisión fue correcta, de que cualquier otro equipo habría hecho lo mismo y de que estaba dentro del espíritu de las reglas.
‘De otro modo, no lo habríamos hecho. Prefiero ser totalmente transparente. En una situación así se puede fácilmente simular algo, pero es mejor decir la verdad. Ese es nuestro estilo, mi estilo’, declaró el jefe de Ferrari.
‘Era nuestra responsabilidad’, añadió, ‘porque sabíamos que la diferencia de agarre entre un lado y otro de la pista era muy grande, y si queríamos estar en la pelea en Brasil era muy importante tener al primer coche arriba en las dos primeras vueltas. En caso contrario la carrera habría prácticamente terminado’.
Domenicali piensa que la realidad les dio la razón. ‘A la vista de lo sucedido, creo que hicimos lo correcto. Cuando trabajas para Ferrari sabes que el equipo es el centro de las decisiones, y los pilotos lo respetan. Tengo que agradecérselo a Felipe (Massa)’.
‘(Massa) Lo comprendió cuando le expliqué la decisión, y si algún jefe de equipo dice que no tomamos la decisión correcta, está mintiendo’, afirmó.
Domenicali confesó que en Ferrari llegaron a pensar en la posibilidad de que Red Bull hiciera algo parecido con su segundo piloto, el australiano Mark Webber, para que Alonso volviera a salir por la parte sucia del circuito.
‘Esa es la razón por la que esperamos hasta el último momento para hacerlo. Es parte de la estrategia, parte del juego’.
El jefe de Ferrari reconoció que al tomar esa decisión no tuvo en cuenta que afectaba también a otros pilotos. ‘Para ser sincero, no pensé en ellos. Si dijera lo contrario nadie me creería, por eso digo que no’.