La prueba en el circuito húngaro es la última antes del parón veraniego, que finalizará con la carrera en Spa-Francorchamps el 28 de agosto, lo que apremia a Ferrari y a McLaren a la búsqueda de una nueva victoria con la que trasladar todos los miedos a Red Bull, donde se ha percibido la mejora notable que han experimentado sus rivales en las últimas carreras.
La hegemonía de Red Bull durante casi todo el campeonato, con el líder del mundial Sebastian Vettel como máxima expresión (seis victorias en diez carreras), ha sufrido dos serios reveses en las últimas carreras, de Silverstone y Nürburgring, en las que primero Alonso y después de Hamilton desplegaron un poderío aún no manifestado antes y se llevaron el triunfo.
No obstante, y a pesar de esta presión contra el equipo Red Bull, y especialmente contra Vettel, el líder y vigente campeón del mundo descansa en lo alto de la clasificación con una ventaja amplia y cómoda de 216 puntos, cuando aún faltan nueve carreras por disputarse. El segundo es su compañero Mark Webber, con 139, y el tercero es el inglés Lewis Hamilton (134), que con su victoria el domingo le arrebató la posición a Alonso (130), ahora cuarto.
La buena racha de resultados de Vettel y su paseo triunfal en el mundial empieza a cuestionarse y ello, además de emoción al campeonato, permite también calibrar el tono del vigente campeón en posiciones retrasadas, como en Nürburgring, cuando los nervios y la ansiedad le llegaron a jugar malas pasadas con fallos en la conducción y la pérdida de cualquier opción a la victoria al poco de haber arrancado la prueba.
La carrera del GP de Hungría empezará a disputarse ya en la clasificación del sábado, dado que el trazado magiar es de una elevada dificultad para los adelantamientos, por lo que la ‘pole’ otorgará grandes opciones de triunfo al piloto que la obtenga, al margen de la estrategia que se siga en el cambio de ruedas.
Los dos Red Bull y los dos Ferrari, además de los McLaren, con un Jenson Button que ha sumado dos ceros seguidos por abandono, se presentan como los coches que volverán a estar peleando por la victoria.
Atrás, Mercedes buscará mejorar un único cuarto puesto que han firmado esta temporada con Michael Schumacher, aunque su compañero de equipo, Nico Rosberg, le aventaja en la general (46 y 32 puntos).
El siguiente equipo que se encuentra batallando por ser la cuarta escudería del campeonato es Renault, que después de los podios que alcanzaron en el arranque de la temporada, con dos terceros puestos de Vitaly Petrov (Australia) y Nick Heidfeld (Malasia), han ido de más a menos.
El español Jaime Alguersuari (Toro Rosso) rompió la semana pasada una racha de tres carreras consecutivas puntuando, mientras que su compañero Sebastien Buemi lleva cuatro sin puntuar y el accidente que provocó la semana pasada le ha llevado a perder cinco posiciones para la parrilla del domingo.
El mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez (Sauber), que el año pasado corrió en el escenario húngaro en la GP2, tiene un agrio recuerdo de aquella doble cita, ya que en la segunda carrera se estrelló.
Tampoco guarda una buena imagen de su anterior carrera, donde se le escaparon los puntos, algo a lo que viene aspirando desde que arrancó el mundial el venezolano Pastor Maldonado (Williams), quien tiene como objetivo acabar por primera vez entre los diez primeros.
La undécima prueba del mundial en Hungaroring será celebrada por muchos pilotos por distintos motivos. Primero, Alonso que cumplirá mañana 30 años y lo hará en el trazado donde en 2003 logró su primera victoria en la Fórmula Uno.
También el español Jaime Alguersuari (Toro Rosso) tendrá razones para festejarlo porque en Hungaroring debutó hace dos temporadas.
Por otra parte, el británico Jenson Button (McLaren) cumplirá en la pista húngara su carrera 200 en la Formula Uno, mientras que el alemán Nico Rosberg (Mercedes) disputará su carrera 100.
Para la prueba del domingo, la FIA ha instalado una única zona para accionar el DRS, mecanismo que permite que el alerón trasero se abra, impidiendo menos agarre y un pico de velocidad mayor. Esta zona estará situada en la recta de meta, que de hecho es el único espacio donde se puede habilitar esta opción para intentar adelantar.
Por otra parte, la empresa suministrada de neumáticos, Pirelli, proveerá de dos tipos de gomas para una carrera que se prevé en seco y soleada; los escogidos son los blandos y los superblandos.
Esta elección se debe a que el circuito húngaro requiere un gran agarre de las gomas sobre un trazado de 4.381 kilómetros donde sólo durante diez segundos los coches corren al máximo régimen de vueltas.
La carrera del domingo es la undécima prueba del mundial. Se correrá en el circuito de Hungaroring (4.381 metros), al que los coches deberán dar 70 vueltas para completar 306’630 kilómetros. La vuelta rápida en carrera la sigue ostentando el alemán Michael Schumacher (1:19.071, 2004).
Álex Santos