Desde el próximo 1 de marzo se pondrá a la venta el nuevo Auris, el compacto de Toyota que “jubila” al conocido y exitoso Corolla y que tendrá unos precios comprendidos entre 14.710 y 25.740 euros. Respecto al viejo Corolla, el nuevo Auris es ligeramente más grande, mejor equipado y cuenta con motores más potentes.
Con unas medidas de 4,22 metros de largo, 1,76 metros de ancho, 1,51 metros de alto y 2.600 mm de distancia entre ejes (tanto para el modelo de tres como de cinco puertas); el nuevo Auris no es mucho más grande que el modelo al que sustituye (5 cm más largo) pero sí ofrece un habitáculo notablemente mayor gracias a su optimizado diseño. Por acabados también observamos una clara mejoría, contando todas las versiones de serie con control electrónico de estabilidad y airbags hasta para las cabezas de las plazas traseras y para las rodillas del conductor.
Estéticamente recuerda claramente a su hermano pequeño Yaris, y en su interior destaca por una curiosa consola central que posiciona la palanca de cambios en un plano bastante elevado y proporciona comodidad por la cercanía al brazo del conductor. Hablando de cambios de marcha, el Auris puede tenerlo manual (de cinco o seis velocidades) o automático (pilotado de cinco marchas y con levas de cambio tras el volante).
De los motores que compondrán inicialmente la gama, uno de ellos es novedad en Toyota –el 1.6 VVT-i de 124 cv- y otros son conocidos bien en el propio Corolla compacto o bien en otras derivaciones del mismo, como el “estrella” de la gama: el 2.2 D-4D de 177 cv ya visto en la berlina Avensis y en el monovolumen Corolla Verso. El modelo básico en gasolina seguirá siendo un 1.4 VVT-i de 97 cv, mientras que en diesel figurarán los 1.4 D-4D de 90 cv y 2.0 D-4D de 136 cv.
De esta forma, el Toyota Auris tendrá en el 2.2 D-4D 177 cv a uno de los compactos más atractivos para los amantes de las altas prestaciones en diesel, al nivel de los Audi A3 2.0 TDI, BMW 120d, Volkswagen Golf GT TDI o Volvo C30 D5; ya que el japonés puede acelerar de 0 a 100 km/h en 8,3 segundos y alcanzar los 210 km/h, con un consumo de sólo 6,2 l/100 km.