Inicio
BUENAS APTITUDES
Ssang Yong se ha decidido a luchar sin complejos en el segmento de los vehículos todoterreno de lujo al comercializar el Rexton. No obstante, con el fin de no encarecer en exceso el modelo de acceso a gama, se cuenta con el Rexton 2.9 TD GLX, que por menos de 30.000 euros permite conducir un TT de grandes dimensiones, de cuidado y moderno diseño y con un comportamiento dinámico realmente bueno tanto en carretera como fuera de ella.
El Rexton es un todoterreno recreacional, como marcan las modas actualmente, pero su conducción ‘off road’ sorprenderá a más de uno por su eficacia en terrenos difíciles. No es como un todoterreno puro, pero sus aptitudes campestres, gracias a la reductora, son muy superiores a las de la mayoría de sus rivales.
Enrique Marco, Autocity.
27 de Agosto de 2002.
DISEÑO Y EQUIPAMIENTO
Mide 4,72 metros de largo, 1,87 m de ancho, 1,76 m de alto y pesa más de dos toneladas, por lo que estamos ante un auténtico mastodonte. Pero lo mejor de todo es que ni un detalle de su voluminosa carrocería se ha dejado en el olvido, consiguiéndose un resultado estético muy favorable. Para ello se ha contado con la maestría de Giugiaro, que ha trazado unas líneas elegantes y modernas.
En el interior la sensación de espacio no defrauda, correspondiéndose como debe con las dimensiones exteriores. El Rexton puede albergar hasta siete pasajeros, y si sólo se monta la segunda fila de asientos, es decir para cinco pasajeros, el volumen que queda para el maletero es inmenso. Por lo que se refiere al diseño del salpicadero y de los asientos, se puede decir que ha mejorado mucho respecto a anteriores modelos de la marca, aunque algunos de sus competidores le aventajan en calidad y textura de sus materiales.
El equipamiento de la versión más económica del Rexton 2.9 TD, el GLX, que se vende por 29.390 euros, incluye de serie airbag para conductor y pasajero, climatizador automático, ABS y cierre con mando a distancia, entre otras cosas.
CONDUCCION
El Ssang Yong Rexton es un vehículo grande y pesado, y con un motor de 120 cv no se puede pedir que sus reacciones sean precisamente rápidas. Ahora bien, para quien la alta velocidad o las aceleraciones fulgurantes no sean aspectos primordiales, el resultado del robusto 2.9 TD de origen Mercedes será más que satisfactorio. Además, la sencillez mecánica del propulsor alemán hace que la fiabilidad se convierta en una de sus mejores virtudes, pues su longevidad está de sobra comprobada.
En carretera el comportamiento del Rexton sorprende gratamente, pues ‘pisa’ muy bien y, aunque se apure un poco en las curvas, apenas se perciben balanceos de la carrocería. Frenada, comodidad, suspensiones… todos estos apartados consiguen que la conducción del Rexton en carretera sea tan satisfactoria como la de un turismo. Eso sí, como hemos dicho antes, siempre y cuando no llevemos demasiada prisa.
Pero lo bueno es que, después de demostrar unas excelentes aptitudes el carretera, llegamos al campo, conectamos la reductora, y su comportamiento raya a gran altura. Evidentemente, no pasará por obstáculos tan complicados como los que superaría, por ejemplo, un Korando, pero la soltura con la que puede afrontar zonas de dificultad media es raro encontrarla en otros TT ligeros. Con una operación tan sencilla como la de conectar la tracción a las cuatro ruedas y la marchas cortas, con sólo pulsar un botón situado en el salpicadero, el Rexton 2.9 TD ascenderá pronunciadas pendientes sin ningún problema, mostrándose en este caso su mecánica más que suficiente.