Hay autos de todas las nacionalidades pero en cuanto a los deportivos, los alemanes saben lo que hacen. El apellido de GSi de Opel se encuentra de vuelta con el Insignia, el cual propone una versión más deportiva que el modelo convencional, sin que llegue a ser el OPC que esperamos para esta generación.
Este Opel Insignia GSi no es un cero a la izquierda, de hecho, puede marcar el inicio del mejor de los tiempos en Nürburgring que el propio Insignia OPC anterior.
Su motor con es V6, en su lugar se encuentra un motor de cuatro cilindros de 2.0 litros, llegando a desarrollar 260 hp y 295 lb-pie de par siendo distribuidas en las cuatro ruedas gracias a una caja automática de 8 velocidades y en un sistema de tracción integral tan avanzado que tiene mención aparte.
Al igual que el Regal GS, la tracción integral del Opel Insignia GSi tiene doble embrague para poder distribuir rápida y precisamente la cantidad de par en las llantas traseras.
El sistema también es capaz de transferir la fuerza necesaria a las llantas delanteras para que desaparezca el excesivo subviraje a la hora de salir de una curva.
Claro que el chasis también ha sido adaptado para soportar una mayor velocidad. Los muelles son más cortos y reducen 10 milímetros la altura del Insignia GSi.
De igual manera, el sistema de amortiguación es más firme para reducir los movimientos de la carrocería al mínimo.
El sistema FlexRide puede adaptar los sistemas de respuesta de los amortiguadores en fracciones de segundo, adaptándose al camino.
El conductor puede elegir entre Standard, Tour y Sport, aunque también cuenta con el modo Competition, exclusivo de la versión GSi, que apaga el motor de tracción para mejorar tiempos en pista.
El interior tiene trato deportivo con nuevas placas, asientos en aluminio, volante específico y asientos de diseño deportivo, brindando ventilación, calefacción y ajuste eléctrico.
Este auto no llegará a México, por lo que habrá que mudarse al “viejo continente” si es que e quiere adquirir y circular en una de estas bellezas.