Un superdeportivo de clara inspiración en las berlinas de la década de los 50. La firma británica Morgan, famosa en el mundo entero por sus producciones limitadas ensambladas artesanalmente y a mano, destapó en el concurso de elegancia de Pebble Beach su nueva máquina en vías de producción, distribución y venta: el Morgan EvaGT, recordando a las exclusivas líneas presentadas por Lotus, Aston Martin o Bugatti, entre otras marcas de prestigio.
El asunto es que esta berlina deportiva, de configuración para cuatro pasajeros (2+2) y con las míticas carrocerías de los 50 en el recuerdo véase Bristol serie 400 y el Frazer Nash BMW 328-, está valorada en 210.000 euros de precio base (para reservarlo tendrás que poner encima de la mesa una fianza que ronda los 6.000 euros) y únicamente se producirán 100 unidades, las cuales se podrán adquirir a partir de mediados de 2012. En California, entre playas, sol, campos de gol, famosos y adinerados, irrumpió el Morgan EvaGT, causando gran furor: 4,7 m de largo, 1,2 de alto y 1,8 de ancho, para un peso final de 1.250 kg, que ha sido posible gracias a un chasis construido completamente en aluminio, derivado del Morgan Aero SuperSports, y a materiales ligeros repartidos tanto por su estilada carrocería como en un habitáculo donde hasta al más remoto y oculto detalle se le presta atención.
Fundada en 1909 por el pastor evangélico HFS Morgan, la empresa, de 163 trabajadores, produce anualmente 650 unidades, que se distribuyen para todo el mundo, con una lista de espera para un automóvil que es aproximadamente de uno a dos años de media. Para el coche que nos ocupa hoy, de morro achatado hacia las aletas, con unos pasos de ruedas sobredimensionados que dejan una línea de capo baja y muy perfilada, con una parrilla delantera de diseño vertical y que enfatiza su carácter deportivo, sorprende el salto vanguardista con respecto a modelos anteriores de la marca. Valga como ejemplos los faros y pilotos traseros con áreas retroiluminadas mediante LEDs; o la caída del techo hacia la pequeña luneta trasera, juntándose con un spoiler puntiagudo, que engrandece la figura coupé de este superdeportivo con trazaos de berlina de alta gama.
El bloque motor, procedente de BMW, firma con la que Morgan ha estado trabajando conjuntamente los últimos tres años, para pulir aún más el motor biturbo de seis cilindros en línea y tres litros de cilindrada, capaces de desarrollar 310 cv de potencia y 400 Nm de par máximo. Por último, la transmisión podrá ser manual (de serie) o automática (opcional), ambas de seis velocidades y ambas puestas a punto en las instalaciones de BMW, donde han sido supervisadas a altas velocidades, temperatura, emisiones y gasto de combustible. Con tracción a las ruedas traseras, los dirigentes de la marca hablan del coche de alta gama más respetuoso con el medio ambiente.
Precisamente por esta ruta quiere moverse la firma británica, tan considerada con sus tradiciones y orígenes como con la inclusión en sus joyas de motores más eficientes y limpios. En esta línea va encaminado el nuevo Morgan LIFEcar, que aglutina a partes iguales deportividad con un tratamiento amable con el medio ambiente. Morgan, reconocida por los especialistas como una marca que mantiene intacto hasta el último milímetro de sus prototipos hasta que llegan a coches de producción, consigue con este LIFEcar consumos y emisiones muy reducidos, sin comprometer el carácter deportivo del coche. La apuesta está sobre la mesa.