La tercera generación del Mercedes SLK está a punto de llegar, pues desde finales de este mes de enero se podrán realizar reservar y, para el mes de marzo, está prevista la llegada de las primeras unidades. Se trata del rodaster premium más famoso, ya que en 1996 se lanzó al mercado con su innovador techo duro retráctil que tantos fabricantes han copiado. La segunda generación llegó en 2004 (renovada en 2008), y también presentó una interesante primicia, ya que estrenó el Airscarft, un sistema de calefacción ubicado en el reposacabezas que envía calor a los hombros y la nuca, de modo que permite circular descapotado aun con temperaturas exteriores bajas. Ahora, la tercera generación del SLK también tiene el honor de salir al mercado con otra interesante primicia: el Magic Sky Control. Se trata de un techo panorámico de cristal que se puede oscurecer pulsando un botón.
Estéticamente el nuevo SLK toma rasgos de su hermano mayor SL y del superdeportivo SLS AMG. Su frontal presenta ahora una parilla más prominente y agresiva junto a unos grupos óticos que incluyen leds para el alumbrado diurno y la posibilidad de llevar el sistema de iluminación activa. En el interior también se toman prestados algunos detalles de los modelos antes nombrados, y en general mejora tanto la calidad como el equipamiento. Por supuesto podrá llevar la bufanda de abrigo Airscarf, la cual probamos en el E Cabrio; el sistema de alerta al cansancio Attention Asisst; el Pre-Safe con función de frenado de forma autónoma si hay riesgo de colisión inminente; el sistema de reconocimiento de señales, etc.
El Magic Sky Control se presenta como primicia y permite oscurecer el techo panorámico transparente a voluntad del conductor
Inicialmente, desde el mes de marzo, la nueva gama SLK la compondrán tres motores de gasolina, dos de cuatro cilindros 1.8 sobrealimentados y un 3.5 V6 atmosférico. El SLK 200 de 184 cv, disponible con cambio manual o 7-G Tronic, alcanza ya los 237 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 7 segundos, mientras que su consumo y emisiones se queda en 6,1 l/100 km y 142 g/km de CO2. Con sólo una décima más de consumo y unas emisiones 2 gr/km superiores, el SLK 250 de 204 cv viene asociado al cambio 7-G Tronic y mejora las prestaciones hasta los 6,6 segundos de 0 a 100 km/h y 243 km/h. Evidentemente el más rápido es el SLK 350 de 306 cv, el cual se pone a 100 km/h en 5,6 segundos y llega al límite electrónico de 250 km/h. Sus consumos y emisiones han quedado muy contenidos, con 7,1 l/100 km y 167 g/km.
En total, algunas versiones han conseguidos reducir hasta un 25% los consumos sin por ello perder en prestaciones. Estos logros son gracias a la puesta a punto de los motores, que incluye en todos ellos la función Eco de arranque y parada de serie . También benefician para tales metas la mejora del coeficiente aerodinámico y la utilización de materiales ligeros (las aletas y el capó son de aluminio).
Así las cosas, se espera que el nuevo SLK continue con el éxito de sus dos generaciones anteriores. Hoy día, su máximo rival será el BMW Z4, que también tiene techo duro. No obstante, los Audi TT Roadster, Porsche Boxster o Nissan 370 Z pueden ser igualmente otras opciones a tener en cuenta, aunque con techo de lona. Lo que no tendrá nadie más que el SLK será el Magic Sky Control, el techo duro y transparente que se puede oscurecer a voluntad del conductor a través de un botón. Con ello puede, o bien obtener la máxima luminosidad o bien protegerse del calor y los rayos del sol. Este innovador sistema se ofrece como opción, ya que de serie el SLK viene con un techo del color de la carrocería, y todavía hay otra opción más sencilla de techo panorámico con cristal tintado oscuro.