Mercedes-Benz acaba de presentar en el Salón del Automóvil de Nueva York su nuevo Clase R, el monovolumen más elitista del mercado. Si bien no se trata de una nueva generación, ya que se lanzó en 2006, hace apenas cuatro años, sí vemos un frontal profundamente remodelado, un nuevo motor CDI y diversos cambios a nivel de estética y equipamiento. El nuevo Clase R llegará a los concesionarios europeos en septiembre y se seguirá ofreciendo en carrocerías larga (5,17 metros) o normal (4,94 metros); con tracción trasera o integral 4Matic; con tres motores diésel y tres de gasolina; y con todas las versiones asociadas al cambio automático de siete velocidades.
Su diseño frontal es muy diferente al del Clase R actual, y entre otras cosas incluye unos nuevos grupos ópticos con faros bixenón e iluminación diurna mediante leds. Al margen de este cambio tan sustancial, se ha modificado lo habitual en este tipo de restyling, como por ejemplo el diseño de las llantas (de 17 a 21 pulgadas), los pilotos traseros, las tapicerías y guarnecidos o algunos elementos del salpicadero. Entre su equipamiento se serie u opcional encontramos el techo panorámico de cristal, los reposacabezas activos, los 8 airbags, algunos elementos de seguridad comunes a los últimos modelos Mercedes (control de crucero activo o el sistema de detección de obstáculos en el ángulo muerto), las suspensiones neumáticas o la cámara trasera para facilitar el aparcamiento entre otras cosas.
Estructuralmente el nuevo Clase R no ha cambiado respecto al modelo que aún se vende, ya que posee una carrocería bastante ancha (1,92 metros) y no muy alta para un monovolumen (1,65 metros). En sus dos tipos de carrocería –normal o larga- ofrece un habitáculo para cinco pasajeros, aunque su configuración se puede modificar a cuatro, seis o siete plazas. El maletero, cuando sólo necesitamos las dos plazas delanteras, llega a una capacidad de 1.950 litros, en el de carrocería de 4,94 metros, y de 2.385 litros, en el de carrocería de 5,17 metros. Se trata de un movolumen prácticamente único, cuyas versiones más accesibles (con un precio cercano a los 60.000 euros) se podrían comparar en todo caso a las versiones más completas de los Chrysler Grand Voyager, Renault Espace o Volkswagen Multivan entre otras opciones.
Finalmente, por lo que a opciones mecánicas se refiere, las tres de gasolina y dos de las diésel apenas han variado, aunque alguna de ellas sí la logrado un descenso significativo de consumo. En gasolina continúan los dos V6 (R300 de 231 cv y R350 4Matic de 272 cv) y el V8 (R500 4Matic de 388 cv). En diésel destaca el consumo reducido del R300 CDI BlueEfficiency de 190 cv, ahora con un gasto medio de 7,6 l/100 km. Menos ha variado el R350 CDI BlueTec 4Matic de 211 cv, al cual no hay que confundir con el nuevo R350 CDI 4Matic sin “apellido” ecológico. Este último gana 41 cv respecto a su predecesor para situarse en 265 cv, convirtiéndose en la opción más interesante de la gama si nos fijamos en la combinación prestaciones/consumos. El nuevo R350 CDI 4Matic de 265 cv es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7,6 segundos y de alcanzar los 235 km/h; todo ello con un consumo medio de 8,5 l/100 km.