El preparador germano Brabus, quizás el de más prestigio de entre los preparadores de los modelos Mercedes, nos desvela desde Bottrop, en Alemania, la última de sus creaciones. Esta vez los inconformistas ingenieros de Brabus se han decidido por potenciar hasta el extremo el Mercedes ML 63 AMG, un modelo ya de por sí muy deportivo para tratarse de un SUV, que de serie es capaz de acelerar de 0 a 100 en 4,8 segundos, y alcanzar los 250 km/h.
Para añadir un plus de potencia realmente significativo al poderoso motor biturbo V8 que monta el ML63 AMG desde Abril del pasado año, y que ha sido puesto a punto por AMG, la división deportiva de Mercedes, han sido necesarias más reformas de las que se pueden apreciar a simple vista al abrir el capó del Brabus B63S. Así, mientras la nueva admisión de aire puede llamarnos inmediatamente la atención, casi tanto como la parte visible del nuevo sistema de escape, que ha sido totalmente rediseñado, otros elementos, como los nuevos turbocompresores, permanecen ocultos a la vista. Estas dos nuevas unidades turbo, son más voluminosas que las originales, y producen más presión de aire, lo que en combinación con a la nueva gestión electrónica, permite no solo aumentar de forma importante la potencia, sino mantener además el cumplimiento estricto de las normas de contaminación Euro V.
Todos estos elementos que se modifican en el motor, no afectan a la fiabilidad del mismo, y así Brabus garantiza por 3 años o 100.000 kilómetros, todos los componentes afectados por la reforma mecánica. Una reforma que además de estar disponible para el ML 63 AMG que aquí os mostramos, lo está también para su hermano, el GL 63 AMG.
¿Merece la pena el resultado? Con una ganancia neta de 173 CV, y un par máximo que superaría los 1000 Nm, pero que se limita electrónicamente a 960 Nm para evitar daños a la transmisión, el vitaminado Brabus B63S es un auténtico misil capaz de poner en aprietos a muchos superdeportivos. La combinación del poderoso motor V8 biturbo con preparación Brabus y del cambio AMG Speedshift Plus 7G-Tronic consigue unas cifras que hablan por sí solas. Con una aceleración de 0 a 100 en 4,4 segundos, casi medio segundo más rápido que el modelo de serie, y una velocidad punta limitada a 300 km/h, estamos ante unas prestaciones más propias de un ligero coupé deportivo que de un SUV de tracción total. Con una aceleración de 0 a 100 en 4,4 segundos, es casi medio segundo más rápido que el modelo de serie
Más allá de las prestaciones puras, el nuevo Brabus B63S 700 Widestar impresiona con unas modificaciones aerodinámicas y estéticas que no esconden las pretensiones deportivas del modelo. El spoiler delantero, en combinación con el trasero, consiguen reducir el efecto de levantamiento de ambos ejes, aumentando el apoyo aerodinámico a alta velocidad, mientras que las entradas de aire sobredimensionadas que se aprecian en el frontal, aumentan el flujo de aire fresco que llega a la mecánica. La funcionalidad aerodinámica no tiene por qué estar reñida con la estética, y así el difusor trasero se integra a la perfección con las nuevas salidas cerámicas del sistema de escape Brabus, dando a la zaga un aspecto inconfundible.
Brabus se ha preocupado también de mejorar la dinámica del ML 63 AMG, ya muy afinada de serie gracias a su buen chasis y su suspensión neumática, pero que han revisado para que esté en sintonía con su renovada capacidad mecánica. Así, las nuevas y enormes llantas de 23 pulgadas, BRABUS Monoblock R Platinum Edition, calzadas con neumáticos de altas prestaciones en medida 315/25 ZR 23, consiguen llamar la atención desde un primer momento, pero no solo se han escogido por eso. En combinación con el módulo de control Brabus para la suspensión Airmatic, que consigue bajar el centro de gravedad del Brabus B63S, consiguen además que el manejo del nuevo SUV sea tan deportivo y eficaz como se podría esperar de un modelo de estas características.