Restyling y nuevo motor
Mercedes-Benz anuncia el primer restyling de su existoso y lujoso coupé de cuatro puertas CLS, momento que aprovecha para introducir una nueva versión de acceso a gama que se venderá esta primavera por debajo de los 60.000 euros. Debido a lo mucho que ha gustado este modelo, la firma de la estrella, con buen criterio, no se ha querido arriesgar al variar su diseño, por lo que los retoques han sido mínimos.
De forma sutil, Mercedes-Benz ha modificado lo habitual en estos casos: parrilla delantera, espejos retrovisores, grupos ópticos, volante y algunos elementos telemáticos. En concreto los retrovisores incorporan unas modernas intermitencias mediante leds, además de proporcionar mayor visibilidad. Luego, en la versión CLS 63 AMG, se presentan nuevas llantas con neumáticos 255/35 R19 delante y 285/30 R19 detrás, y también un nuevo sistema de escape que aporta un mejor sonido.
Pero la novedad mecánica radica en la introducción de un nuevo motor de acceso a gama. Se trata del V6 gasolina de 3,0 litros de cilindrada y 231 cv de potencia, el cual se denomina CLS 280 y ya lo conocíamos de otros modelos de la marca Mercedes, como en el nuevo Clase C. Costará unos 6.000 euros menos que el otro V6 de gasolina, el 350 CGI, y anuncia unas prestaciones más que respetables. Gracias a un buen par motor de 300 Nm y al eficiente cambio 7G-Tronic (de serie), el nuevo Mercedes CLS 280 puede acelerar de 0 a 100 km/h en 7,7 segundos y alcanzar los 245 km/h, siendo su gasto medio de 9,8 l/100 km, cifra de consumo ligeramente peor que la del más potente de inyección directa CGI.
El resto de la gama mecánica sigue siendo la misma. El más vendido es el diésel CLS 320 CDI de 224 cv; mientras que en gasolina permanecen los CLS 350 CGI de 292 cv, CLS 500 de 388 cv y CLS 63 AMG de 514 cv; todos ellos con caja de cambios 7G-Tronic como equipación estándar.