Mazda 6

VOLVER A EMPEZAR

El esperado Mazda6 llegará en junio, primero con carrocería cuatro puertas y tres motores de gasolina con potencias de 120 a 166 CV. En septiembre la gama se completará con las versiones cinco puertas y familiar, así como un motor turbodiesel de 120 y 136 CV.

El lanzamiento del Mazda6 supone para la marca japonesa el inicio de una nueva etapa. El nuevo modelo se inscribe en el segmento de las berlinas medias-grandes y lo hace con sólidos argumentos, como son una línea muy atractiva, buena habitabilidad, una presentación y equipamientos muy correctos y, sobre todo, un excelente comportamiento dinámico.

Destinado a sustituir al 626, el Mazda6 parte de cero, lo que equivale a decir que la plataforma es absolutamente nueva. Sobre la misma se ha montado una carrocería 10 cm más larga que la del 626, alcanzando los 4,68 m, mientras que la cota de anchura, con 1,78 m, se sitúa entre las mejores del segmento; la distancia entre ejes es de 2,68 m, lo que en definitiva ofrece garantías de una buena habitabilidad.

INTERIOR Y EQUIPAMIENTO

El maletero, con unas formas internas muy aprovechables, tiene una capacidad de 500 litros ampliables abatiendo el respaldo trasero por partes o totalmente. La versión 5 puertas dispone de un sistema denominado «karakuri» (como las muñecas japonesas) que se acciona desde un lateral del maletero y hace que la banqueta trasera al abatirse el respaldo también rebaje su altura y así el plano de carga quede totalmente liso. Debajo del mismo, la rueda de repuesto es de tamaño normal.

En el interior hay espacio para todos pero de manera muy especial para los pasajeros de atrás, gracias a una cota de anchura muy notable; también hay suficiente espacio para las piernas y la altura libre al techo no ofrece problemas incluso para tallas de 1,80 m. El salpicadero es de diseño muy lineal, sin recovecos, con un cuadro de instrumentos en el que dominan dos grandes relojes con el bisel cromado de fácil lectura. La consola central, en símil titanio, agrupa los mandos de la calefacción-ventilación y audio, así como las bocas de aireación. En general, la presentación es muy buena y lo mismo cabe decir de la calidad de materiales y acabados.

VERSIONES Y PRECIOS

La primera versión en llegar al mercado a finales de junio será la sedan, con tres motores de gasolina, todos de 4 cilindros desarrollados por Mazda, realizados íntegramente en aleación ligera y dotados de doble árbol de levas en culata. El motor de partida es un 1.8 litros que rinde 120 CV a 5.500 rpm y ofrece un excelente rendimiento desde muy pocas vueltas. La versión intermedia es un 2.0 litros con 141 CV a 6.000 vueltas, mientras que en el vértice se sitúa el 2.3 litros con 166 CV a 6.500 rpm. Todos con cambio manual de 5 velocidades de manejo suave y muy preciso pero en el caso del 2.0 litros también puede llevar uno automático de 4 marchas. En septiembre, cuando lleguen las carrocerías de 5 puertas y familiar, también lo hará un motor turbodiesel de inyección directa common rail de 2 litros con turbocompresor de geometría variable que se ofrecerá con potencias de 120 y 136 CV.

En materia de suspensiones, Mazda no ha querido quedarse atrás y ha hecho un notable esfuerzo. Delante monta un sistema de doble horquilla mientras que atrás ha optado por un eje multibrazo que la marca denomina «e-type» de elaboración propia, con unos resultados realmente excepcionales que confieren al coche un comportamiento dinámico de los mejores que últimamente hemos tenido ocasión de probar. En cuanto a frenos, todas las versiones llevan discos ventilados delante y macizos atrás, con ABS y asistencia a la frenada.

El coche saldrá al mercado con dos niveles acabados, Active y Sportive. Este último reservado exclusivamente al motor 2.3. En el caso del Active, la dotación de serie no puede ser más completa, ya que incorpora doble airbag frontal y lateral, así como airbags de cortinilla para las plazas delanteras y traseras, climatizador, ABS, control de tracción, servodirección, volante regulable en altura y profundidad, ordenador de a bordo, elevalunas y retrovisores eléctricos, equipo de audio con CD y mandos en el volante, llantas de aleación de 16 pulgadas, cierre centralizado y faros antiniebla El acabado Sportive lleva todo esto y además añade tapicería de cuero, faros de xenon, llantas de aleación de 17 pulgadas, asientos calefactados y regulables eléctricamente y lavafaros. Como únicas opciones figuran el sistema de navegación, el techo eléctrico y la alarma.

El precio de venta del Mazda6 1.8 Active es de 21.150 euros, el de la versión 2.0 litros de 22.450 euros y el del 2.3 litros Sportive se sitúa en 26.250 euros.