Copia china del Range Evoque
Ian Callum, el director de diseño de Jaguar Land Rover (JLR), colgó una foto en Twitter y añadió: ‘¿No hemos visto esto antes?’. Tirando de ironía el ejecutivo de la marca se refería así al parecido más que razonable que guarda el Landwind X7 con su niño bonito Evoque. En un posterior comunicado oficial la marca de origen británico avisaba de emprender ‘medidas apropiadas’ ante un modelo que considera ‘un plagio’. El Landwind X7, que tiene previsto entrar en producción en diciembre y llegar al mercado con un precio final en China de aproximadamente 17.000 euros, juega con la ventaja de ser un coche local mientras que el Evoque de importación, después del pago de los aranceles chinos, asciende a un montante próximo a los 75.000 euros.
Esta pérdida de competitividad es la razón por la que Land Rover ha decidido producir sus coches en China en su nueva planta de fabricación en Changshu, al noreste de Shanghai, y construidos conjuntamente con su socio Chery Automobile. Con esta nueva estrategia el Evoque rebajaría su precio hasta los 52.000 euros, todavía un montante muy superior al del X7. Ralf Speth, CEO de Jaguar Land Rover, ha declarado que esta ‘copia en curso en China es muy decepcionante’ y está directamente relacionada con el hecho de que ‘nosotros empecemos a producir aquí y podamos ser más competitivos’.De la planta China de Land Rover saldrán 150.000 unidades al año del Evoque
A juzgar por las imágenes, parece que Landwind no ha tenido reparos en clonar casi pieza por pieza al Evoque, desde la carrocería, hasta el habitáculo, pasando por el grupo motriz, que comparte una sospechosa configuración técnica con alguna de las motorizaciones conocidas en el Evoque, esto es, un motor de cuatro cilnidros, 2.0 litros, 188 cv de potencia, y la elección entre un cambio manual de seis velocidades o una caja automática de ocho.Hasta el conjunto motriz es sospechosamente parecido al motor de acceso a la gama Evoque
El Landwind X7 se venderá en China, en otros países de la órbita asiática y dará el salto hasta América del Sur, pero en ningún caso llegará a Europa, donde Landwind ya lo intentó hace unos años. Y es que a pesar de la estética tan trabajada (emblemas aparte, poco lo distingue del Evoque), el X7 difíclmente pasaría las pruebas de seguridad del Viejo Continente (EuroNCAP) como en 2005 ocurrió con el todoterreno X6, un derivado del Isuzu Amigo de los años 80 que se fabricó y se vendió en Europa como Opel Frontera.