Con motor 5.0 V8 de 510 cv
A principios de año anunciamos la llegada de la berlina de altas prestaciones XFR, y ya en ese momento adelantamos que las nuevas mecánicas se iban a implantar también en el deportivo XK. Ahora, desde este mes de marzo la nueva gama XK de Jaguar ya está disponible en los concesionarios tanto en su versión Coupe como en la versión Cabrio, por unos precios que oscilan entre 98.300 y 123.700 euros.
Los nuevos XK se diferencian del anterior modelo (aparecido en 2006) por unos paragolpes, grupos ópticos, rejilla, retrovisores, llantas, tapicerías y algunos elementos del salpicadero rediseñados. Son los típicos retoques que las marcas realizan normalmente a mitad de la vida comercial del modelo, y que en este caso han mantenido la deportividad y elegancia a la vez que le han dado un toque de modernidad (por ejemplo, retrovisores y pilotos incluyen pequeños leds).
Pero lo más importante en este cambio de la gama XK es su nuevo motor. Jaguar dice adiós al 4.2 V8 para dar paso a un nuevo 5.0 V8 con inyección directa de gasolina y sistemas de admisión y distribución variables. El incremento de potencia es espectacular en las dos versiones en las que está disponible (atmosférico y sobrealiementado), pero es que además logra rebajar tanto los consumos como las emisiones. Otra ventaja del nuevo motor es que sus periodos de mantenimiento se han alargado hasta los 24.000 km (16.000 km en el anterior 4.2).
El nuevo Jaguar XK alcanza los 385 cv de potencia y 515 Nm de par, de modo que mejora claramente su cifra de aceleración de 0 a 100 km/h: 5,5 segundos. En el caso del XKR sobrealimentado la potencia sube hasta los 510 cv y el par hasta los 625 Nm, por lo que consigue un tiempo en el 0 a 100 km/h de 4,8 segundos. Además los consumos han bajado, obteniendo una cifra media ahora de 11,2 l/100 km el XK y de 12,3 l/100 km el XKR. Por su parte, la velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h.
La caja de cambios es en ambos casos automática de seis velocidades, siendo su mando de manejo ahora un selector como el que estrenó la berlina XF. En cualquier caso el cambio es posible manejarlo en modo secuencial a través de las levas dispuestas tras el volante. Esta caja de cambios ha sido reforzada para los nuevos motores 5.0 V8, y en el caso de XKR incluye un diferencial electrónico que optimiza la tracción.
Con estas nuevas versiones, que sustituyen a los anteriores XK8 y XKR, Jaguar posiciona mucho mejor su modelo deportivo frente a la competencia, de modo que los BMW M6, Mercedes SL o Porsche 911 ya pueden temer al nuevo felino, no les vaya a dar un buen zarpazo (en cuota de ventas, claro).