Inconformista
Con el i30 la marca coreana da un giro en su imagen y filosofía. Estrena nomenclatura, diseño y un nivel de calidad a la altura de los rivales más modernos del mercado. Dicho así el compacto asiático pinta muy bien, aunque la competencia entre los coches de sus medidas es muy dura.
a favorMotor ágil y elástico.Calidad interior.Estabilidad y aplomo.en contraEl climatizador no es bizona.Diseño similar a modelos de la competencia.Su principal rival es del mismo grupo.
Modelos como el Citroën C4, el Fiat Bravo, el renovado Ford Focus, el Mazda 3, el Nissan Tiida, el Opel Astra, el nuevo Peugeot 308, el Renault Megane, el Seat León, el Toyota Auris o el ya veterano Volkswagen Golf -para el que pronto se espera la sexta generación- son los contrincantes en la lucha por las ventas, ya que todos ellos tienen mecánicas con potencias próximas a las del modelo que nos ocupa.
En Autocity nos ponemos al volante de uno de los integrantes del segmento C que más revuelo ha levantado. Los motivos son varios, pero el principal y más morboso es que tiene un primo llamado Kia Cee´d, del que nos llevamos gratas impresiones durante la prueba que realizamos el año pasado.
Algunos pensarán que exageramos un poco. Nosotros creemos que es interesante saber si la espera ha merecido la pena respecto a su homólogo de Kia (marca del grupo Hyundai), sin llegar a compararlos directamente. ¿Será el mismo coche, pero con nombres diferentes, o habrá más detalles que los distinga?1Nombre: FICHA TÉCNICAMotor: 4 cil. / 1.582 cc Potencia máx.: 115 cv a 4.000 rpmPar máx.: 255 Nm a 2.000 rpmCombustible: Turbodiésel ‘common rail’ Tracción/cambio: Del. / Man. 5 vel.Frenos: Discos Ventilados / DiscosNeumáticos: 225/45 R17 Carrocería: 5 puertasLarg-Anch-Alt: 4.245 – 1.775 – 1.480Peso en vacio: 1.266 kgMaletero: 340 / 1.250 litros Nº plazas: 5Velocidad máx: 188 km/h Aceler. 0-100: 11,6 segundosConsumo mixto: 4,7 litrosEuroNCAP: 4Precio: 21.100Ficha Jato: http://www.autocity.com/coches/nuevos/hyundai/i30/1.6_crdi_vgt_115_style_sport/5_puertas/berlina_con_portón/index.html
Para esta prueba contamos con la inestimable ayuda de una conductora, Sonia. Sus opiniones sobre el Hyundai i30 son muy interesantes para analizarlo desde un punto de vista distinto, más práctico y racional para el uso cotidiano de un coche.
El compacto coreano se perfila como una opción dirigida a un público joven con un ritmo de vida dinámico. Cumple con las expectativas del conductor medio, dejando un poco de lado ese sentimiento pasional presente en la compra de vehículos más prestacionales.
Lo primero que pensamos al verlo es que a pesar de ser el mismo coche que el Cee´d, se distingue sin problemas con unas líneas de diseño marcadas y dinámicas, tanto en la trasera como en los laterales de la carrocería. Los faros son otros de los elementos que le diferencian de su primo, más angulosos y rasgados -sobre todo los traseros, los delanteros son casi iguales-.
Sonia, que nos ayudó con esta prueba, dice que para ella lo tiene todo. Es bonito, espacioso y con cinco puertas -algo importante y a destacar para una chica-. El diseño interior resulta muy pintón con las luces de los mandos en azul, gris y rojo. Además la cantidad y el tamaño de los huecos portaobjetos le parecieron perfectos para el día a día de una conductora joven, que siempre lleva un millón de cosas en el bolso.
El acabado de nuestra unidad es el Style Sport y los materiales y sus ajustes están a la altura, con apariencia y tacto muy buenos -nos sorprendió gratamente la presencia del cuero, también en los paneles de las puertas-. El salpicadero y la disposición de los mandos es casi idéntica a la del compacto de Kia.
Llegamos a una de las partes críticas para el sexo femenino, el maletero que con 340 litros de capacidad puede llegar hasta los 1.250, si abatimos los asientos de atrás. Es decir que las maletas de nuestra amiga tendrían espacio, aunque viajase con cuatro personas más, ¡siempre y cuando no se pasen, claro! Lo que nos recuerda que el banco trasero del i30 es cómodo por su altura al techo y con amplitud suficiente para tres ocupantes de talla media-alta.
El equipamiento de serie es muy completo y en él encontramos el volante con los mandos de audio integrados y el pomo del cambio en cuero, asientos mixtos de cuero y tela calefactables, radio-CD con MP3, sensores de luz y lluvia, junto con los de aparcamiento, llantas de 17 pulgadas montadas en neumáticos de perfil bajo de 225 mm de ancho y climatizador. Por supuesto hay que añadir los sistemas de seguridad como el ABS -obligatorio en todos los modelos nuevos desde hace años-, los controles de estabilidad y de tracción, y los airbags.
El Hyundai i30 se caracteriza por una mecánica turbodiésel common rail enérgica que sube de revoluciones casi como un deportivo de gasolina. Su motor 1.6 CRDi con 115 cv de potencia a 4.000 rpm se muestra muy vivo, progresivo y elástico, con una subida de régimen rápida, constante y contundente que en ocasiones nos hace buscar una sexta velocidad inexistente.
Los 255 Nm de par a 2.000 rpm del compacto coreano le impulsan hasta los 100 km/h en 11,6 segundos, consiguiendo una velocidad punta de 188 km/h y un consumo combinado a los 100 km -según la marca- de 4,7 litros.
La dirección es exacta y fiel a nuestras órdenes -pesa menos que la del Cee´d- sin dejar de ser cómoda al aparcar y durante los desplazamientos en ciudad. La caja de cambios de 5 velocidades tampoco tiene pega para Sonia, por su accionamiento suave.
Las suspensiones del modelo asiático completan su comportamiento dínamico -junto con las llantas de 17 pulgadas- y equilibrado que no menosprecia el confort -aunque con un enfoque más sport que en su primo de Kia-, permaneciendo a la altura de los mejores rivales del segmento.
Al volante se hace tan difícil descolocar el i30 en zonas de curvas, aun con el ESP desconectado, como realizar un viaje incómodo. El aplomo que ofrece este Hyundai se debe a una batalla -distacia entre ejes- envidiable de 2.650 mm que garantiza un calidad de rodadura destacable.
El precio de nuestra versión, equipada con muchos elementos de confort es de 21.100 euros. Pensarás que es caro para ser coreano, pero es que los coches bien hechos no se regalan.